Hoy: 10 de octubre de 2024
La Audiencia Provincial de Álava ha absuelto a tres acusados de un delito de lesión a la dignidad por motivos racistas tras increpar a un usuario del Banco de Alimentos por acudir a recoger la comida en un coche de alta gama, de marca Mercedes.
El fallo reconoce que los insultos y reproches que hicieron los acusados al denunciante, natural de Mauritania, por entender que se estaba lucrando de las ayudas públicas cuando tenía otros bienes que podía haber utilizado al no ser de primera necesidad, no son apropiados ni se encuentran justificados.
Sin embargo, considera que, en este caso, no nos encontramos ante expresiones que contengan un mensaje de odio, ni que entrañen humillación o menosprecio. “No son expresiones graves que afecten a sentimientos comunes de la ciudadanía por lo que cabe entender que no concurre el dolo que exige el tipo penal”, concluye.
Sobre las 16:20 horas del 14 de julio de 2020 los acusados, junto con un cuarto varón no identificado, se encontraban en un bar situado enfrente del Banco de Alimentos localizado en la calle Reyes de Navarra nº 21 de Vitoria-Gasteiz.
En el exterior del Banco de Alimentos estaban José Augusto, nacional de Mauritania, acompañando a su expareja Leticia, nacional saharaui. Junto a ellos había aproximadamente una docena de personas de origen extranjero respecto de las que no se produjo ningún tipo de incidente. José Augusto, el ciudadano mauritano que denunció los hechos, estaba introduciendo los alimentos en un vehículo de alta gama (MERCEDES) que había aparcado frente al bar antes citado. Al ver que se estaban produciendo varias cargas de alimentos gratuitos, a pesar de disponer de vehículo propio, personas no identificadas, que estaban en la terraza del bar, le increparon y le recriminaron que recibiera ayudas públicas y que no trabajara.
Al darse cuenta de esto y tras ser alertado por una empleada del Banco de Alimentos José Augusto decidió comenzar a grabar los hechos con la cámara de su teléfono móvil. A continuación y en distintos momentos Fulgencio e Íñigo, dos de los
encausados, cruzaron la calle y se acercaron a José Augusto.
Mientras Fulgencio trataba de calmar la situación pidiendo tranquilidad, Íñigo se dirigió a José Augusto diciéndole en voz baja ” hijo de puta, mala gente, eso lo has conseguido trabajando y doce horas al día, verdad? a lo que José Augusto contestó “yo también trabajo “.Simultáneamente el cuarto varón no identificado cruzando la calle y a la vez que que se aproximaba a José Augusto le dijo a gritos “por qué no grabas el coche, tu metes cuarenta litros de leche y hay gente que no tiene nada de verdad, y tú tienes para gasolina y para el seguro de tu coche o no lo tienes? Y luego vienes aquí a pedir para tus hijos, venga tío no tienes cara, ni nada.”
En ese mismo momento Jaime cruzó también la calle junto al varón no identificado acercándose a escasos centímetros de la cara de José Augusto y gritando y en actitud airada le dijo ” yo me gasto mi dinero en lo que quiera porque trabajo”. A continuación el varón no identificado abandona el lugar mientras que Jaime, uno de los absueltos, encarándose nuevamente a José Augusto y en respuesta a las increpaciones de Leticia, la acompañante y expareja de José Augusto, le dijo” pero yo trabajo, yo trabajo de verdad, me levanto a las cuatro de la mañana para hacer quinientos kilómetros todos los días, eso es trabajar, te lo demuestro cuando quieras”.
Durante este episodio, la expareja de José Augusto Leticia, se dirigió hacia los absueltos peguntándoles si trabajaban, si usaban el dinero para emborracharse y les llamó hijos de puta.