A prisión un monitor de artes marciales acusado de agresiones sexuales a menores

Los agentes han incautado dispositivos electrónicos con miles de archivos de contenido explícito de explotación sexual infantil

El Juzgado Mixto número 4 de El Ejido (Almería) ha decretado el ingreso en prisión provisional de un monitor de artes marciales detenido por la Policía Nacional por un presunto delito contra la libertad sexual a menores y posesión de pornografía infantil.

Así lo ha dado a conocer este viernes la Policía en una nota en la que ha explicado que por parte de agentes especializados se ha llevado a cabo una «exhaustiva investigación» tras recibir denuncias en las que se ponían en conocimiento diversas agresiones sexuales a menores cometidas, presuntamente, por un monitor de artes marciales que regentaba un gimnasio de la localidad, donde el supuesto autor aprovechaba su posición para perpetrar estos actos.

Durante los registros efectuados en el marco de esta operación se han incautado ordenadores, tablets, teléfonos móviles, cámaras de fotos, discos duros y otros soportes informáticos.

El análisis inicial de estos dispositivos reveló la existencia de miles de archivos de «contenido explícito de explotación sexual infantil», además de hallarse rastros de otros archivos que habían sido grabados anteriormente y habían sido borrados de estos dispositivos, lo que hace pensar a los investigadores que este individuo era «consumidor habitual de este tipo de material pedófilo».

Colaboración policial

La investigación ha contado con la colaboración del Grupo VI de Ciberdelincuencia de la Brigada Provincial de Policía Judicial de Comisaría de Policía Nacional en Almería, que ha realizado el examen forense de los dispositivos intervenidos en los registros.

De la investigación se destaca que algunos de los vídeos y fotogramas obtenidos fueron realizados en el propio gimnasio donde el detenido trabajaba, quien presuntamente grababa sin autorización a las víctimas, vulnerando así la intimidad de las menores.

Aunque se ha levantado el secreto de sumario, la investigación «sigue abierta para identificar a más víctimas de estos hechos», así como para determinar la participación de otras personas con las que el presunto autor podría haber compartido o intercambiado el material pedófilo.