Hoy: 22 de noviembre de 2024
Las comidas y cenas de Navidad son una oportunidad “para desarrollar la marca personal”, según el coordinador del Máster en Desarrollo Personal y Liderazgo de la Universidad Internacional de La Rioja (UNIR), Israel Carrasco. Además, piensa que suponen un buen momento “para conectar con la empresa”.
Durante la Navidad, las comidas y las cenas dentro de la propia empresa forman parte del imaginario colectivo tanto como el tiempo con la familia y la lotería. Pero, para Carrasco, también para estrechar lazos con las personas que conocemos y con las que no.
En torno a la marca personal, Carrasco señala que es un “conjunto distintivo y único de habilidades, experiencias y valores”. Se trata de “cómo somos percibidos y nos comunicamos en el entorno laboral en el que nos movemos”, recalca.
Por eso, para Carrasco, estos encuentros “son un buen momento para transmitir” estas características “de una forma más cercana, en un entorno diferente y profundizando en aspectos que la gente no conocía”.
Respecto a qué hay que evitar, indica que es necesario “entender el contexto”. “Es una celebración navideña, una mezcla entre lo laboral y lo social y hay que mantener el equilibrio”, subraya.
“Tenemos que potenciar el saber estar, evitar los excesos, porque puede afectar a tu imagen profesional, así como desinhibirnos de forma descontrolada”. Eso sí, sin olvidar que “lo que hay que potenciar es generar conexiones”, destaca.
También cree que el momento posterior a la fiesta es igual de fundamental que esta. Y donde tenemos que pensar “qué imagen queremos dar” porque, si se publican fotos, “eso va a quedar allí”.