Hoy: 23 de noviembre de 2024
La rápida proliferación de la tecnología de Inteligencia Artificial hace que surjan casi a diario nuevas necesidades y controversias por parte de los diferentes colectivos que, de un modo y otro, se ven afectados.
Organizaciones que engloban a más de seis millones de artistas, creadores e intérpretes han reclamado soluciones globales para garantizar que las empresas de Inteligencia Artificial paguen por las obras que “son explotadas”.
En un manifiesto firmado por una decena de organizaciones, recogido por Europa Press, exigen proteger la creatividad humana, mantener “sólidos” los principios de los derechos de autor y desarrollar y aplicar “prácticas justas” de concesión de licencias.
El avance de la IA ha sido rápido y sin precedentes. En todo el mundo, los gobiernos reconocen la magnitud y las posibles repercusiones del uso de la IA en nuestra vida cotidiana , por lo que han dado prioridad a las medidas destinadas a salvaguardar los intereses del público en general, a la vez que tratan de preservar la innovación y el progreso tecnológico.
El sector cultural y la comunidad creativa reconoce que “hay una serie de fines útiles e importantes a los que se está aplicando actualmente la IA en general”. Sin embargo, en el caso de la IA generativa, advierten de que “existe una necesidad clara y urgente de que los responsables políticos de todo el mundo tomen medidas, adapten y mejoren los regímenes reguladores actuales”.
En este sentido, consideran que “es imperativo” que estén presentes en los debates políticos para garantizar que sus intereses se tengan en cuenta y que los sistemas de IA “sean transparentes, éticos, justos y legales”.
Las organizaciones firmantes, que representan a más de 6 millones de creadores, intérpretes y editores de todo el mundo, hacen un llamamiento a los gobiernos y a los responsables políticos para que se comprometan a “desarrollar y adoptar políticas y legislaciones coherentes”.
En concreto, piden defender y proteger los derechos de los creadores e intérpretes cuando son explotados por sistemas de IA; que haya soluciones de concesión de licencias para todas las posibles explotaciones de obras, representaciones y datos protegidos por derechos de autor por parte de los sistemas de IA; o que se eviten las excepciones para la minería de textos y datos que no prevean la opción de exclusión efectiva (opt-out) por parte de los titulares de derechos.
En la misma línea, reivindican que “debe evitarse la introducción de excepciones, incluso para la minería de textos y datos (TDM), que permitan a los sistemas de IA explotar obras y representaciones protegidas por derechos de autor sin autorización o sin remuneración a los mismos”.
También apuntan que los creadores e intérpretes “deben tener derecho a obtener reconocimiento y créditos cuando se haya explotado sus obras por sistemas de IA” y que “deben aplicarse obligaciones de transparencia para garantizar prácticas de IA más justas”.
En cuanto a la responsabilidad jurídica de los operadores de IA, consideran que deberían existir requisitos legales y una rendición de cuentas “efectiva” para que las empresas de IA mantengan los registros pertinentes.
Para las organizaciones firmantes, la IA “es sólo un instrumento al servicio de la creatividad humana, y los planteamientos jurídicos internacionales deberían reforzarlo: los modelos de IA deben considerarse simplemente como un instrumento al servicio de la creatividad humana”.
El documento ha sido firmado por AEPO-ARTIS, ALCAM, AMA, APMA, CIAGP, CIAM, CISAC, ECSA, IMPF, MCNA y SCAPR.