El Museo Nacional Thyssen-Bornemisza ha inaugurado la exposición Gaza a través de sus ojos, compuesta por 27 fotografías tomadas por fotoperiodistas palestinos que muestran la devastación en la Franja. El director del museo, Guillermo Solana, explicó que se trata de un proyecto humilde pero profundamente necesario: “No podemos mostrar nada más que un rincón de la inmensa devastación, de la inmensa ruina, del sufrimiento enorme de la población palestina. Pero tiene un valor de testimonio vivo”.
El ministro de Cultura, Ernest Urtasun, subrayó que la muestra busca dar voz “a quienes son silenciados” y reivindicar la dignidad del pueblo palestino. Durante la inauguración, destacó el papel de la cultura como herramienta transformadora: “La cultura visual tiene un poder inmenso: abrirnos los ojos ahí donde a veces preferimos no mirar. Estas 27 fotografías son un acto de testimonio y de resistencia, pero también un llamamiento a la conciencia colectiva”.
Urtasun aprovechó el acto para recordar la reciente decisión del Gobierno de aprobar un embargo de armas a Israel. Calificó la medida de “coherente con nuestro compromiso con la paz y el derecho internacional”, y reconoció la influencia de los movimientos culturales en esa determinación. “El sector de la cultura ha alzado la voz por Palestina, y eso ha sido determinante”, afirmó.
La exposición, abierta hasta el 19 de octubre, no revela la identidad de los 27 fotoperiodistas por razones de seguridad. Raquel Martí, directora de UNRWA en España, confirmó que todos siguen vivos, aunque en condiciones extremas: “Ningún fotoperiodista ha sido asesinado, aunque han estado a punto. Uno de ellos ha perdido treinta familiares y dos de sus mejores amigos y compañeros de trabajo”.
Solana subrayó la diferencia de perspectiva entre estos fotógrafos y los enviados internacionales: “Son hijos, hermanos y amigos de quienes retratan. Muestran los aspectos más obscenos del horror de la guerra, pero con empatía y respeto”. Además, recordó que Gaza ha sido escenario de “la mayor masacre de fotoperiodistas de la que hay noticia, con más de 200 asesinados”.
Por su parte, Martí denunció la crítica situación humanitaria en Gaza y la fragilidad financiera de UNRWA: “En dos meses no tendremos más fondos para pagar a nuestros trabajadores. No hay lugares humanitarios en Gaza, no existen. No hay agua, no hay alimentos, no hay absolutamente nada que garantice la supervivencia”. Además, señaló que las mujeres y niñas sufren de manera particular: “Medio millón afronta condiciones higiénicas deplorables; no hay compresas, no hay jabón, y están siendo estigmatizadas”.
Finalmente, Urtasun rechazó las acusaciones de antisemitismo contra España por sus críticas a Israel. “Denunciar el genocidio en Gaza nada tiene que ver con antisemitismo”, afirmó, y pidió apoyar a las voces judías que también condenan la violencia. “Una cosa son las políticas sionistas del Estado de Israel y otra muy distinta es la comunidad judía”, concluyó.