Hoy: 19 de febrero de 2025
La amnistía y el ‘caso Koldo’, que en la oposición llaman el ‘caso Ábalos’, pasa factura a los socialistas en el primer CIS tras saltar el escándalo de corrupción en el que se ven envueltos el poderoso exministro y dirigentes como la presidenta del Congreso, Francina Armengol.
El barómetro de opinión del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) correspondiente al mes de marzo, el primero tras la primera votación de la Ley de Amnistía en el Pleno del Congreso, el estallido del ‘caso Koldo’ y las elecciones gallegas, sitúa al PP casi tres puntos por encima del PSOE, rompiendo el empate técnico del mes anterior.
En concreto, la encuesta sitúa al PP en cabeza con una estimación de voto del 34% y 2,7 puntos de ventaja sobre el PSOE, que se queda en un 31,3%. Los ‘populares’ sacan además cinco puntos a los socialistas en voto ya decidido, con un 25,2% por el 20,8%.
Por su parte, Vox escala hasta la tercera plaza y anota una estimación de voto del 9,9%, por delante del 9,2% de Sumar, que hasta ahora mantenía con holgura la medalla de bronce.
La preocupación por la corrupción ha subido siete puntos en el Barómetro de opinión del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) – del mes de marzo, el primero realizado tras el estallido del ‘caso Koldo’. Este fenómeno vuelve así al ‘top ten’ de los problemas de España del que llevaba fuera muchos meses y se coloca en la sexta posición con un 12,2% de menciones, frente al 4,9% del mes anterior.
Con todo, la lista de problemas nacionales sigue encabezada por la crisis económica (29%) y el paro (18%), pero la tercera posición es esta vez para ‘el mal comportamiento de los políticos’, que se anota un 16,8%, casi cinco puntos más que en febrero.
También han aumentado las menciones al Gobierno y los partidos, que rozan ya el 15% y que conquistan la cuarta plaza, así como las que reciben ‘lo que hacen los partidos’, que pasan el 5,8 al 11% en marzo, y se colocan justo detrás de la corrupción.
La ciudadanía española respalda en gran medida las protestas de agricultores y ganaderos acontecidas en las últimas semanas, achacan sus problemas al desequlibrio de precios en la cadena alimentaria y a la competencia desleal de otros países y creen que son el Gobierno y la Unión Europea quienes más pueden hacer para resolverlos.
Esto es lo que dice el avance de resultados del estudio de marzo realizado por el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), presentado este miércoles, en el que se recoge una batería de preguntas sobre la crisis del sector primario que ha provocado una serie de protestas en las últimas semanas por toda Europa.
Según la encuesta, el 87,9% de los encuestados están al tanto de las movilizaciones en mayor o menor medida y la mayoría muestra su respaldo a las mismas. De hecho, menos de un 5% se ha mostrado contrario a las reivindicaciones, a lo que se suma que el 73,6% de encuestados asegura haber sufrido entre poco y nada sus consecuencias en el transporte o las carreteras.
Sobre el origen de los problemas en este sector, el 39% de encuestados interesados por el tema cree que se produce por el desequilibrio de precios en la cadena alimentaria, seguido de la competencia desleal de terceros países, con un 31,5%.
En el total de la encuesta, un 59,4% de los entrevistas sitúa la cadena alimentaria como el principal problema y otro 56,3% menciona la competencia desleal de terceros países. Ambas opciones son sugeridas por el CIS y no han sido citadas espontáneamente por los encuestados.
El CIS también pregunta sobre quién puede hacer más para resolver los problemas del sector agrícola, a lo que el 36,6% opina que es la Unión Europea la mayor responsable y el 35,9% cree que es el Gobierno de España. Sólo un 7,5% de encuestados creen que las que más pueden hacer son las autonomías.