Una residente de Puente Genil, en una férrea lucha legal y respaldada por la Ley de Segunda Oportunidad, ha logrado la anulación total de una deuda que ascendía a más de 1.127.000 euros. Esta suma, que se había acumulado en gran medida debido a su papel como avalista en la empresa de su esposo, se eximió por completo tras un intenso proceso judicial.
El despacho de abogados Morón y Montero ha anunciado este hito, subrayando que la Ley de Segunda Oportunidad brinda la chance de un nuevo comienzo eliminando cargas financieras previas. Esta ley posibilita que particulares y autónomos cancelen deudas que no excedan los cinco millones de euros, bajo la condición de actuar de buena fe y no tener condenas por delitos socioeconómicos.
En este escenario, el Juzgado de lo Mercantil Nº1 de Córdoba ha decidido aplicar a la cliente el Beneficio de la Exoneración del Pasivo Insatisfecho (BEPI), liberándola de todas sus deudas y eliminandola de los registros de morosos, han enfatizado desde el bufete de abogados.
La cancelación de esta deuda no solo supone un alivio económico , sino que también establece un precedente relevante en cuanto a la defensa de los derechos de los consumidores frente a entidades financieras. Este caso, que ha captado la atención tanto a nivel local como nacional, destaca la importancia de la información clara y precisa en los contratos financieros, así como la relevancia de la lucha por la justicia en el ámbito legal.
Este logro se erige como un ejemplo de perseverancia y determinación, inspirando a otros individuos que puedan encontrarse en situaciones similares a no desistir en la búsqueda de la justicia.