Hoy: 22 de noviembre de 2024
España está viviendo su peor verano en cuanto a temperaturas extremas, tanto máximas como mínimas. Especialmente las mínimas nocturnas que han marcado récords, superando los 25 grados. Unas temperaturas que han llegado para quedarse de cara a los periodos estivales.
Las altas temperaturas de los termómetros ha incrementado la sequía en nuestro país y ha ocasionado los mayores incendios forestales a lo largo y ancho de la Península. Y las temidas olas de calor sofocante han superado todos los registros por su duración y dureza.
En este sentido, España ha sufrido tres olas de calor, estando 42 días sumida en temperaturas más que tropicales, según la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), en donde los abanicos, las botellas de agua, los aires acondicionados, las playas y las piscinas no han sido compañía suficiente para los españoles.
La primera ola se vivió el 12 de junio con una duración de siete días. Semanas después, concretamente el 9 de julio, dio inicio la segunda ola de calor con una duración de 18 días, hasta el 26 de julio, y siendo la más intensa de todas y la segunda más larga registrada en nuestro país. Con multitud de hectáreas arrasadas por las llamas, España afrontaba con incertidumbre la tercera ola de calor, que comenzó el 30 de julio y concluyó el 15 de agosto.
Según un estudio de la Aemet, España nunca antes había vivido 42 días de ola de calor en un año. Y las previsiones para el 2023 no son nada alagueñas, pues este tipo de fenómenos extremos están cada vez más presentes y van a aumentar en los próximos años, debido en gran parte a la crisis climática que azota al planeta.