En el Museo del Prado, y en otros muchos de distinta consideración, se refleja gran parte de la Historia de España. Dicen los expertos que Velázquez fue el único maestro que supo pintar el viento. Pues, aun en ese viento que no se ve en los lienzos, estamos reflejados.
Disfruto con gratitud y reconocimiento que setenta asociaciones culturales hayan salido en defensa de la Historia de España y su reflejo común en la enseñanza. Últimamente, para algunos, el Guadalquivir no había nacido en Cazorla ni Santa Teresa era de Ávila, ni es la Mancha lo que refleja el Quijote , sino la comarca del Ampurdán, que por cierto debe su nombre al Emporión de los griegos.
La Historia española de los últimos veinte siglos, tiene sus raíces en Jesucristo, traído a nuestras latitudes por Santiago, a pesar de que los españoles de entonces estaban en otra cosa. Cambió la permeabilidad de los corazones gracias a que la Virgen en el Pilar echó una mano en el desarrollo de la fe.
…Los protagonistas de la Historia a veces aciertan y otras yerran, pero ignorarlos es como si con una esponja quisiéramos borrar el tiempo. Aquí somos aficionados a eclipsar lo que no nos gusta, en vez de corregirlo… por eso la dictadura vuelve y vuelve, por más que nos empeñemos en cambiarle el nombre.