El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, ha corregido sus declaraciones del domingo en las que afirmó que solo aceptaría un cese de hostilidades «parcial» en el contexto de un acuerdo para la liberación de rehenes.
Además, Netanyahu ha destacado su disposición de aceptar un alto el fuego en respuesta al plan israelí presentado por el presidente estadounidense Joe Biden, el 31 de mayo pasado. Durante su discurso ante el Parlamento israelí, también afirmó su respaldo a la propuesta de alto el fuego presentada por el presidente Biden.
La propuesta esbozada por Biden, cuyo contenido completo no ha sido publicado, incluye liberación de rehenes en una primera fase a cambio de un alto el fuego provisional que podría convertirse en definitivo en negociaciones posteriores.
Sin embargo, el comandante israelí dijo, en la primera entrevista concedida desde el 7 de octubre, que está dispuesto a «llegar a un acuerdo parcial» con relación a los secuestrados, pero estaría aún así «obligado a seguir con la ofensiva tras una pausa para lograr el objetivo de destruir a Hamás».
El alto mando del Ejército de Israel ha subrayado que no va a poner fin a la guerra hasta que traiga de vuelta a todos los rehenes: «No vamos a terminar la guerra hasta que eliminemos a Hamás y los vecinos del sur puedan regresar con seguridad a sus casas».
La iniciativa israelí esbozada por Biden incluye un alto el fuego provisional en una primera fase que en la segunda derivaría en «una calma sostenible con el cese permanente de las operaciones militares y de las hostilidades».