Hoy: 10 de noviembre de 2024
La empresa líder en tecnología Meta, ha dado un paso significativo en el campo de la robótica y la inteligencia artificial al presentar su conjunto de herramientas para la investigación en robótica. Una de las características más destacadas de estas herramientas es el simulador de robots y avatares humanoides Habitat 3.0, diseñado para entrenar a robots en la realización de tareas cotidianas que impliquen una estrecha colaboración con seres humanos.
La misión de Meta se centra en mejorar la tecnología de los robots “socialmente inteligentes”, permitiendo que no solo realicen tareas diarias, sino que también se adapten a las preferencias y necesidades de sus “socios humanos”.
El grupo de investigación FAIR de Meta ha desarrollado un conjunto de herramientas que promueven la investigación en robótica a través de simuladores, conjuntos de datos y una plataforma de hardware y software para asistentes de robots domésticos.
Habitat 3.0 se destaca como una de las herramientas más importantes, ya que habilita la colaboración entre humanos y robots en entornos hogareños. Es el primer simulador que permite el entrenamiento a gran escala en la interacción persona-robot en escenarios realistas en interiores.
El desarrollo de este simulador se inició en 2019 con Habitat 1.0, que permitía a los robots aprender a navegar rápidamente a través de imágenes en 3D de casas reales. En 2021, Meta introdujo Habitat 2.0, que permitía el entrenamiento en entornos interactivos, incluyendo acciones como recoger objetos o abrir cajones. Esto permitió a los robots aprender tareas como ordenar una sala de estar o preparar una receta en la cocina.
Con Habitat 3.0, se han agregado capacidades de interacción con humanos. Los robots pueden colaborar en tareas cotidianas y trabajar junto a avatares humanoides. Estos avatares son personalizables y poseen una apariencia realista, con movimientos y acciones naturales que permiten simular interacciones auténticas. Los avatares se pueden controlar mediante políticas de aprendizaje automático o directamente por humanos utilizando teclado, ratón o visores de realidad virtual.
Una de las ventajas más destacadas de Habitat 3.0 es la capacidad de entrenar políticas de IA robótica en la presencia de avatares humanoides en entornos hogareños de la vida real. Esto permite un aprendizaje significativo sin requerir millones de iteraciones, como suele ocurrir en experimentos físicos que a menudo llevan años. Además, se minimiza el riesgo de daños a personas o entornos, ya que las pruebas se realizan en un entorno seguro.
Meta también ha enfatizado que estas innovaciones se prueban con usuarios reales mediante un marco de evaluación humana simulada proporcionado en el simulador Habitat 3.0. Este avance promete revolucionar la investigación en robótica y allanar el camino para robots que puedan colaborar de manera segura y eficaz con humanos en una variedad de aplicaciones cotidianas.