El 2023 finaliza con un saldo trágico en las vías españolas, con al menos 1.097 fallecidos, según datos provisionales de la Dirección General de Tráfico (DGT) hasta el 18 de diciembre. Esta cifra representa un leve aumento con respecto al año anterior.
En comparación con el 2022, el número de fallecidos en carretera era de 1.094 para la misma fecha. A pesar de las fluctuaciones anuales, desde el 2020, cuando se registraron 975 fallecidos, las cifras se han mantenido preocupantemente altas.
El análisis a largo plazo revela una tendencia a la baja desde 2004, aunque los últimos años muestran cifras estancadas alrededor de los 1.200 fallecidos anuales. Sin embargo, el 2023 registra un aumento de al menos 40 muertes respecto al 2019, año sin restricciones por la crisis sanitaria.
Los datos detallan un incremento en fallecimientos de usuarios vulnerables, como peatones y ciclistas, ascendiendo a 449 en el 2023, un 10% más que el año previo. En cuanto a los vehículos involucrados, los turismos lideran las estadísticas con 526 fallecidos.
Además, la distribución por género muestra una mayor incidencia en hombres, con 865 fallecidos frente a 226 mujeres. Por edades, los grupos de 45 a 54 años y de 55 a 64 años son los más afectados. Andalucía, Cataluña y Castilla y León son las regiones con mayor número de muertes en carreteras durante el 2023, con 187, 145 y 119 fallecidos respectivamente.
Fuentes de la DGT destacan cambios normativos implementados previamente que podrían influir en las estadísticas, mientras proyectos pendientes como el Reglamento de Circulación se reactivan tras el adelanto electoral.