España se posiciona como el país europeo y segundo del mundo, después de los Estados Unidos, con el espíritu aventurero más destacado, según un estudio realizado por la agencia de viajes eDreams. Los resultados revelan que un significativo 41% de los españoles ha confesado haber salido de su zona de confort en sus viajes, mientras que un 37% tiene la intención de hacerlo próximamente. En resumen, un impresionante 78% de la población española muestra interés en este tipo de experiencias viajeras.
Los motivos que impulsan a los españoles a aventurarse fuera de su zona de confort incluyen el desafío personal, la oportunidad de autoaprendizaje y la posibilidad de conocer otras formas de vida. Estos factores se destacan como principales impulsos para embarcarse en viajes fuera de lo común.
Comparado con otros países, España lidera tanto en Europa como en el mundo en términos de espíritu aventurero, solo superado por Estados Unidos. Por otro lado, en el extremo opuesto se encuentran los viajeros británicos, entre quienes solo el 44% muestra interés o ha experimentado viajar fuera de su zona de confort, seguidos por los alemanes (65%) y los suecos (67%).
Los resultados también indican que los jóvenes de entre 25 y 34 años son los más dispuestos a vivir estas experiencias (82%), en contraste con los adultos mayores de 65 años (41%). En cuanto al género, los hombres parecen sentirse más seguros aventurándose en sus viajes, con un 71% dispuestos a hacerlo, en comparación con el 64% de las mujeres.
Elementos básicos para considerar qué es un viaje aventurero
El estudio también exploró los elementos que convierten un viaje en una aventura. Para los residentes en España, la improvisación durante el viaje se destaca como el factor principal (30%), seguido de aprender técnicas de supervivencia (18%), viajar solo (15%) y renunciar a lujos (13%). Otros elementos menos populares incluyen la búsqueda de la sostenibilidad total en el viaje (13%) y la elección de unas vacaciones lujosas (11%).
Además, los resultados revelan diferencias generacionales y de género en cuanto a las preferencias. Por ejemplo, los adultos mayores de 65 años consideran que viajar solo es crucial para salir de su zona de confort, mientras que los jóvenes de 35 a 44 años no le dan la misma importancia. Las mujeres valoran más la improvisación y las técnicas de supervivencia, mientras que los hombres muestran un mayor interés en la sostenibilidad.
En cuanto a las motivaciones para realizar viajes fuera de la zona de confort, los españoles citan el desafío personal, el autoaprendizaje y la exposición a diferentes formas de vida como los principales beneficios. Además, esperan que estas experiencias tengan un impacto duradero en sus vidas cotidianas, incluyendo un cambio en sus hábitos y la oportunidad de aprender sobre nuevas culturas e idiomas. Las preferencias varían según la edad y el género, con los jóvenes enfocados en el desafío personal y las personas mayores en el cambio en su vida cotidiana y el aprendizaje de nuevas formas de vida. Las mujeres valoran especialmente el desafío personal, mientras que los hombres se centran en el autoaprendizaje y la exploración de otras formas de vida.