El papa León XIV ha aterrizado este jueves en Ankara para iniciar su primer viaje como pontífice, que lo llevará por Turquía y Líbano hasta el 2 de diciembre. A su llegada, fue recibido con honores militares y por el ministro de Cultura y Turismo, Mehmet Nuri Ersoy, antes de dirigirse al Mausoleo de Atatürk. Allí escribió: “Doy gracias a Dios por poder visitar Turquía e invoco para este país… una abundancia de paz y prosperidad”, según informó el Vaticano.
El pontífice se reunió poco después con el presidente Recep Tayyip Erdogan, quien expresó su deseo de que la visita sea “beneficiosa para toda la humanidad” en un momento marcado por la inestabilidad global. León XIV subrayó que Turquía debe ser “un factor de estabilidad y acercamiento entre los pueblos”, apelando a su papel histórico como puente entre continentes y culturas.
En un discurso en la Biblioteca Nacional del Palacio Presidencial, el papa destacó que el país es “una encrucijada de culturas y religiones”, advirtiendo de que el mundo vive una fase de “fuertes conflictos globales” en la que prevalecen “las estrategias de poder económico y militar”. Citó la expresión de su predecesor, el papa Francisco, al señalar que se trata de “una tercera guerra mundial a pedazos”.
León XIV afirmó que “está en juego el futuro de la humanidad” y ofreció la colaboración de la Santa Sede para impulsar soluciones diplomáticas. En su encuentro con Erdogan, uno de los temas centrales fue la búsqueda de salidas negociadas a la guerra entre Rusia y Ucrania y al conflicto en Gaza. El presidente turco aplaudió su “astuta postura” sobre la cuestión palestina y defendió la necesidad de una solución basada en los límites de 1967.
El pontífice también pidió reforzar la contribución de las mujeres en la vida social, en un contexto marcado por protestas que reclaman el regreso de Turquía al Convenio de Estambul contra la violencia de género. Definió al país como “una encrucijada de sensibilidades”, advirtiendo de que su “homogeneización” sería “un empobrecimiento”, especialmente para la minoría cristiana que representa apenas el 0,1% de la población.
Erdogan, por su parte, subrayó que Turquía «fomenta el respeto por todas las religiones”. El viaje del papa tiene como principal objetivo participar en Iznik —la antigua Nicea— en las celebraciones por los 1.700 años del primer concilio de la cristiandad. A lo largo de la visita, León XIV pronunciará nueve discursos, cinco saludos y dos homilías, usando inglés para los actos oficiales y francés para las liturgias.