Le Pen: "Me han juzgado en un proceso que es más bien político"

La líder de Agrupación Nacional ha sido condenada por malversación de fondos y piden para ella cuatro años de cárcel

Marine Le Pen, líder del partido ultraderechista Agrupación Nacional (RN), se ha pronunciado tras su inhabilitación durante cinco años por malversación de fondos, y ha acusado al sistema judicial francés de utilizar una «herramienta poderosa» y de «lanzar una bomba nuclear» debido a la «cercanía de su formación a la victoria».

Durante una rueda de prensa celebrada en la sede de la Asamblea Nacional, en coincidencia con un encuentro de su grupo parlamentario, ha asegurado que no permitirán que esta situación se produzca y que defenderán el derecho del pueblo francés a votar libremente. También ha denunciado que se está faltando al respeto al país.

En relación con la decisión judicial anunciada el lunes, que supone su inhabilitación durante cinco años tras ser condenada por malversación de fondos, Le Pen ha subrayado que utilizará todos los medios a su alcance para garantizar la libertad de voto de los ciudadanos y que, en su opinión, la justicia y la verdad deben prevalecer.

«No vamos a dejar que esto suceda, vamos a defender al pueblo francés, que tiene el derecho de votar a quien quiera, y de defender al país, al que se le está faltando el respeto», ha declarado.

«Nos robaron las elecciones legislativas, y no vamos a dejar que nos roben las presidenciales», ha sostenido, al tiempo que ha acusado a los magistrados de «interferir» en asuntos políticos. «Me han juzgado en un proceso que es más bien político», ha puntualizado.

Cuatro años de cárcel

Por su parte, el fiscal jefe del Tribunal de Casación, Rémy Heitz, ha defendido la sentencia contra Le Pen, que la condena a cuatro años de prisión, dos de ellos firmes y los otros dos bajo supervisión con brazalete electrónico. Según ha explicado en declaraciones a la emisora RTL, el fallo ha sido emitido por tres jueces independientes e imparciales y ha sido dictado conforme a la ley.

«Esta decisión ha sido tomada de acuerdo con la ley y aplicando los textos legales existentes», ha continuado, antes de describir como «inadmisibles» los ataques «personales vertidos contra magistrados». «Las amenazas pueden llevar a la apertura de casos ante la Justicia», ha advertido al considerar que las palabras de Le Pen «se exceden».