Hoy: 22 de noviembre de 2024
China, con más de 1400 millones de habitantes, es unos de los países más poblados del mundo. Es la primera potencia mundial y el segundo país más grande de Asia.
Desde 1978, es el país que ha experimentado el mayor crecimiento económico del planeta. Asimismo, es el mayor exportador e importador de bienes y materia prima industrial.
Es curioso: hace 60 años la gente en China se moría de hambre. Pero en los últimos decenios el país ha salido de aquella hambruna y hoy se sitúa entre los países más prósperos del mundo. Esto es debido a la mano de obra barata y a la exportación masiva de productos de bazar a un precio muy inferior a los del resto de países. Su economía actual es 40 veces superior a la de los años 50 y 60.
Es famosa la frase de Den Xiopin de que “no importa que el gato sea blanco o negro siempre y cuando cace ratones”. Xioping es el líder que impulsó el inicio del éxito económico de China a finales de los años 70. Él desarrolló un modelo económico llamado ‘Reforma y Apertura’.
Por otro lado, China cuenta en la actualidad con unos de los ejércitos más potentes del mundo. Tiene más de dos millones de soldados, sofisticados portaaviones y armamento nuclear. El servicio militar es obligatorio para todos los ciudadanos chinos mayores de 18 años, mientras que las mujeres realizan servicios sociales.
Si el auge económico de China es tan elevado, ¿por qué no regresan a casa los millones de chinos que abandonaron el país en los últimos decenios en busca de mejores de condiciones de vida?
Porque en China los productos básicos son más caros que España y los sueldos son bajos. Los colegios, da igual que sea público o privado, no son gratuitos y por tanto se tiene que pagar una cuota al mes.
Los primeros chinos que llegaron a España lo hicieron a finales del siglo XVI, y desde 1998 ha ido creciendo el número de inmigrantes chinos a la Península en busca de una vida mejor para ellos y sus familias.