Hoy: 22 de noviembre de 2024
Hoy, 5 de septiembre, la NASA celebra el 47º aniversario del lanzamiento de la Voyager 1 desde Cabo Cañaveral en 1977, que en 2012 se convirtió en la primera nave en cruzar hacia el espacio interestelar.
Primer ingenio espacial capaz de diagnosticar y resolver problemas a bordo, esta sonda robótica de 722 kilos de peso, sigue operativa en la actualidad, prosiguiendo su misión extendida que es localizar y estudiar los límites del sistema solar, incluyendo el cinturón de Kuiper y más allá, así como explorar el espacio interestelar inmediato, hasta el fin de misión.
El 25 de agosto de 2012, a 122 unidades astronómicas, la sonda dejó atrás la heliopausa, siendo la primera en alcanzar el espacio interestelar.
Su misión original era visitar Júpiter y Saturno. Fue la primera sonda en proporcionar imágenes detalladas de los satélites de esos planetas.
A una distancia actual de 164 unidades astronómicas del Sol (unos 24.400 millones de kilómetros), según la NASA, es la nave espacial más alejada de la Tierra y la primera en abandonar el Sistema Solar. En diciembre de 2018 fue secundada por su gemela Voyager 2.
A la Voyager 1 le quedan unos 17.700 años aproximadamente para salir de la nube de Oort, una estructura esférica de objetos transneptunianos casi a un año luz del Sol. Entrará en ésta en unos 300 años aproximadamente.
La veterana nave superó a mediados de 2024 un problema que desde noviembre de 2023 le impedía enviar datos legibles de ciencia e ingeniería y que pudo ser resuelto desde la Tierra.
La Voyager 1 es actualmente el objeto hecho por el humano más alejado de la Tierra, viajando a una velocidad relativa de la Tierra y el Sol mayor que la de ninguna otra sonda espacial. A pesar de que su hermana Voyager 2 fue lanzada 16 días antes, la Voyager 2 nunca rebasará a Voyager 1.
Ni tampoco la misión New Horizons a Plutón y el Cinturón de Kuiper, a pesar de que fue lanzada de la Tierra a una velocidad superior que las dos Voyager, ya que durante el curso de su viaje, la velocidad de la Voyager 1 fue incrementada debido a tirones gravitacionales asistidos.
Voyager 1 tiene una trayectoria hiperbólica, y ha alcanzado velocidad de escape, lo que significa que su órbita no regresará al sistema solar interior.
Ambas sondas Voyager han sobrepasado su tiempo de vida calculado en un principio. Cada sonda obtiene su energía eléctrica de tres RTG, (generador termoeléctrico de radioisótopos) de los cuales se espera que estén generando suficiente energía para que las sondas estén en comunicación con la Tierra hasta por lo menos el año 2025.