La enfermedad es conocida por afectar a niños menores de cinco años en la India, aunque se trata de una afección común y de sencilla recuperación
Recientemente, daba el salto a los medios de comunicación de todo el mundo una noticia que alertaba sobre una nueva enfermedad en la India, denominada coloquialmente como “gripe del tomate”. Sin embargo, esta enfermedad tiene poco de novedosa, ya que se trata de una afección común y de sintomatología leve entre los niños del país hindú.
El nombre correcto, desde el punto de vista científico, para la patología es enfermedad de manos, pies y boca (HFMD, por sus siglas en inglés) y se caracteriza por presentar síntomas como fiebre alta, dolor en las articulaciones y erupciones cutáneas de color rojizo, de ahí su comparación exagerada con la forma de un tomate.
La alarma social se hizo palpable cuando un artículo publicado en la revista Lancet Respiratory Medicine vio la luz el 17 de agosto, declarando que <<justo cuando estamos lidiando con la probable aparición de la cuarta ola de COVID-19, un nuevo virus conocido como gripe del tomate o fiebre del tomate, ha surgió en la India en el estado de Kerala en niños menores de cinco años>>.
Los expertos del país afectado se han mostrado realmente sorprendidos ante tales declaraciones, dado el prestigio de la publicación científica que acogía la noticia, y rechazan el afán de crear sensacionalismo en torno a una enfermedad que se considera común en la India, incluso llegándola a renombrar sin justificación científica.
Las cepas responsables del brote actual de HFMD fueron identificadas como enterovirus (un tipo de virus común que se transmite a través del intestino) Coxsackie A16 y A6 por el Instituto de Virología Avanzada del estado en Thonnakkal. Sin embargo, desde el artículo de The Lancet, lo relacionan erróneamente con otro virus, el de chikungunya.
El investigador Aravind Reghukumaar, quien dirige el Departamento de Enfermedades Infecciosas en el Trivandrum Medical College, administrado por el estado, en Kerala, califica de <<ridícula>> esta comparación. <<La HFMD posee un diagnóstico clínico que no se puede confundir con chikungunya o dengue>>, señaló a SciDev.Net.
Tal y como explica Reghukumaar, los brotes de HFMD se relacionaron con la apertura de los centros educativos en Kerala, a finales de 2021, tras permanecer cerradas casi dos años por la pandemia de COVID-19. Además, dadas las restricciones sanitarias impuestas durante la pandemia, las infecciones virales disminuyeron, por lo que, tras la reapertura de los colegios, ya se preveía un aumento de los casos de HFMD y otras infecciones similares.
Por todo esto, las autoridades sanitarias quieren hacer una llamada a la calma, alegando que la enfermedad es muy conocida por los investigadores indios, además de contar con tratamientos efectivos y muy pocas complicaciones asociadas. No obstante, dado el interés público en este tipo de brotes empujado por la traumática experiencia de la pandemia de COVID, es de suma importancia que no se propaguen noticias sensacionalistas e innecesarias que “desinformen” a la población mundial.