El ministro de Cultura y Deporte, Miquel Iceta, ha destacado el impulso del Gobierno español al “Libro Verde para una gestión sostenible del patrimonio, con la creación de un grupo de trabajo en el que están representadas todas las instituciones relacionadas con el patrimonio cultural en España”.
El objetivo de este grupo de trabajo es dotar al sector de un conjunto de herramientas y recomendaciones que permitan la gestión del patrimonio cultural para favorecer el desarrollo sostenible de los territorios a través de la participación social, la accesibilidad universal y la digitalización, y contribuir así a la eficiencia económica, la conservación del medio ambiente y equidad social.
“Las herramientas y recomendaciones contenidas en el Libro Verde estarán disponibles para todas las partes interesadas y esperamos que puedan contribuir al trabajo colectivo, a nivel europeo y mediterráneo”, ha avanzado.
El ministro participa desde ayer en la Conferencia euromediterránea de ministros de Cultura que se celebra en Nápoles. Iceta ha defendido las políticas que está llevando a cabo España en la sesión de trabajo de este mediodía en la que se aborda el desarrollo sostenible y la transición digital.
Iceta se ha referido a la relación entre el cambio climático y la cultura. “Debemos actuar inmediatamente”, ha asegurado. Según ha explicado, se debe de hacer frente a la amenaza de catástrofes climáticas identificando acciones para proteger el patrimonio de la forma más efectiva y usando la cultura, utilizando la cultura, el patrimonio tangible e intangible, como herramientas valiosas en la lucha contra la crisis. “La cultura es un motor de las dimensiones económicas, sociales y ambientales del desarrollo sostenible”, ha insistido.
España está actualmente implantando el Plan Nacional de Adaptación al Cambio Climático 2021-2030 y trabajando intensamente en actuaciones para hacer frente a la crisis climática a través de los Planes Nacionales de Patrimonio Cultural, compartidos por administraciones, entidades públicas e instituciones privadas. Son actuaciones que evalúan la situación de riesgo y el estado de cada tipo de patrimonio cultural. El objetivo es prevenir los riesgos que afecten al patrimonio cultural, incluidos los edificios históricos, los yacimientos arqueológicos, las obras de arte, así como el patrimonio cultural y natural inmaterial, los jardines o los paisajes culturales.