Infancia detenida

8 de junio de 2025
1 minuto de lectura
Joven sentada en el suelo. | Fuente: Freepik.

A Ovidia Igual Fraile

No todo guarda la debida distancia. No importa el tiempo que llevemos en la nave, algunas cosas nos siguen conmoviendo. Nos golpean inesperadamente en el momento más inoportuno. Nos hiere como palabra en dardo lanzada a destiempo. Tan innecesaria como un inmerecido elogio.

Detenida en el umbral del sótano carcelario encontré una niña perdida. Su apariencia infantil me compiló a preguntarle su edad. Sólo 18 años, y de ellos me temo que muchos apenas la habían rozado. Su aspecto era de una chica de instituto, solo que ella venía de lugares menos habitables.

Sostenía la mirada sin ningún tipo de emoción o afecto. Como si su mente hubiera quedado al otro lado de las rejas. Se intuía que su casa había sido deshabitada hacía tiempo, desmontada de tal forma que ya a nadie se espera.

Se tiene la impresión que su lectura de derechos le es tan ajena y lejana como una patera a la deriva. Que fuera de lo que se ve nada queda. Sabe que pronto quedará libre para colocarse otras cadenas.

Algún día, salvo que lo impida algún confuso dios, volverá transformada en otra que habrá devorado para siempre a la que hoy todavía se esboza.

Responder

Your email address will not be published.

No olvides...

¿Por qué los brujos? La apostasía del alma y la renuncia a la luz verdadera

“No podéis beber de la copa del Señor y de la copa de los demonios.”…

Impunidad institucional, ese es el problema, ¿se darán cuenta quienes mandan?

Este entorno de deterioro institucional se acompaña de nuevas expresiones de descontento, muchas vinculadas con la impunidad que persiste y…

Damos lo que tenemos: la proyección del ser y la esencia de nuestras interacciones

"Lo que somos es el don de Dios para nosotros. Lo que hacemos con lo que somos es nuestro don…

El gran libro de los desertores del honor

¿Son las elecciones honestas? Se supone que sí, en un país donde la democracia se cumpla, punto por punto y…