Hoy: 23 de noviembre de 2024
El Real Madrid sumó este domingo tres sufridos puntos después de remontar y batir por 3-2 a la UD Almería, el colista de LaLiga EA Sports 2023-2024 que fue por delante 0-2 en el Santiago Bernabéu y que terminó cayendo en el minuto 100 con un gol de Dani Carvajal, que decidió un partido marcado por el videoarbitraje, que sonrió al conjunto madridista en tres decisiones claves.
El equipo de Carlo Ancelotti necesitaba una victoria para dejar atrás la derrota en el derbi copero, pero se quedó ‘dormido’ y a punto estuvo de pagarlo. Una horrible primera parte le condenó a levantar una buena desventaja antes del descanso y lo logró porque el técnico italiano reaccionó con cambios que despertaron a los suyos.
Sin embargo, en medio de un momento en el que desde el club se cuestionan los arbitrajes, esta vez el VAR donde estaba Alejandro Hernández Hernández le resultó vital en su nueva épica remontada. Tres veces fue Francisco José Hernández Maeso al monitor en tres jugadas casi seguidas y todas ellas fueron cruz para el conjunto almeriense, castigado con dureza cuando casi tenía el consuelo de un punto al menos en la mano.
El Real Madrid no afrontó el duelo como era obligado. Sus primeros 45 minutos fueron los peores en mucho tiempo y esta vez no encontró el auxilio de un colista, negado toda la temporada y que se vio en una situación prácticamente impensable cuando llegó al descanso con una ventaja de dos goles y con Maximiano sin haber tenido que realizar ninguna intervención.
El conjunto madridista pecó de narcisista y olvidó que en el fútbol la superioridad y la diferencia en la tabla es siempre teórica. Antes del primer minuto ya iba perdiendo, tras otra concesión defensiva que no perdonó Ramazani ante Kepa Arrizabalaga, el titular esta vez en el debate de la portería. Sin embargo, ese golpe no le hizo despertar ni acelerar, pensando que bastaría con jugar con excesiva lentitud ante los nueve hombres que colocó Gaizka Garitano.
La mejor ocasión del Real Madrid fue un intento de corte de Chumi a centro de Carvajal que acabó dando el susto a Maximiano. En este panorama, el equipo de Carlo Ancelotti, que con la posesión no tenía soluciones y sólo daba algún atisbo de poder hacer algo cuando robaba, se terminó de complicar las cosas. Un despeje errático de Nacho lo ‘cazó’ en una tremenda volea Édgar, un central que estaba fuera de sitio, para hacer el 0-2 al filo del descanso y desatar el enfado del público local.
Nacho, Mendy y Rodrygo pagaron los ‘platos rotos’ en un triple cambio que metió Ancelotti en busca de salir de la ‘pesadilla’. El Real Madrid sí salió con la ambición que requería la remontada y logró meterse en el partido pronto con un penalti anotado por un Bellingham y después de que Hernández Maeso acudiese al monitor para ver la mano de Kaiky en un salto con Rüdiger pudiendo hacer también falta.
Poco después, el colista avisaba que no estaba ‘muerto’ y una contra muy bien ejecutada Arribas silenciaba el Bernabéu. Pero el monitor volvió a ser adverso a los intereses del equipo andaluz y anulaba ese balón de oxígeno por un manotazo previo de Lopy en la cara a Bellingham. No tardaría demasiado Hernández Maeso en volver al monitor, de nuevo con decisión favorable para el equipo madridista al conceder como válido el gol que previamente había anulado de Vinícius por considera que había rematado con el brazo y no con el hombro.
El colista había perdido su botín y aún debía de resistir seguramente media hora o más el ímpetu local. Maximiano salvó el 3-2 con una gran salida ante Vinícius y Bellingham estuvo cerca de arrebatarle el premio de gol de la jornada a Édgar con una chilena que se fue cerca del palo. Con el Real Madrid lanzado, el añadido dio once minutos y los locales encontraron el gol salvador con un centro cruzado que cabeceó Bellingham y ‘cazó’ la fe de Carvajal en el segundo palo.