La defensa del progenitor alegó que no hubo intención de matar, sino de causar lesiones, pero el TSJA rechazó el argumento
El Tribunal Superior de Justicia de Aragón (TSJA) ha ratificado la condena a Daniel Arizón Simón por intento de homicidio y tenencia ilícita de armas. La sentencia confirma los nueve años de cárcel impuestos por la Audiencia Provincial de Zaragoza, que determinó que Arizón disparó a su cuñado en la cara con intención de matarlo.
Los hechos ocurrieron el 17 de enero de 2023 en Villamayor de Gállego. Daniel Arizón, junto a su hijo Daniel A. D., acudió armado a la vivienda de su hermana y su cuñado, Óscar S. F. Al llegar, ambos se enfrentaron a la víctima, quien intentó protegerse detrás de su furgoneta. Arizón disparó, y aunque los perdigones atravesaron los cristales del vehículo, Óscar S. F. sufrió graves heridas en la cara.
La defensa de Arizón alegó que no hubo intención de matar, sino de causar lesiones, pero el TSJA rechazó el argumento. El tribunal afirmó que Arizón disparó a corta distancia con una escopeta de caza y que la única razón por la que Óscar S. F. no murió fue la intervención de su hermana, que se interpuso para protegerlo.
Durante el juicio, se detalló que Daniel Arizón y su hijo portaban una pistola de aire comprimido semiautomática y una escopeta de corredera sin culata, robada en Huesca en 2020. Los jueces subrayaron que el uso de estas armas y la violencia del ataque reflejan una intención clara de causar la muerte. La víctima sufrió lesiones graves en la nariz, el labio, el pómulo y un ojo, requiriendo una intervención quirúrgica y un largo periodo de recuperación de 196 días.
Daniel A. D. compartía la responsabilidad del ataque, pese a no haber disparado
El TSJA también destacó en su fallo que Daniel A. D. compartía la responsabilidad del ataque, pese a no haber disparado. La presencia y el apoyo de su hijo durante el incidente, así como el conocimiento del uso de las armas, fueron factores determinantes para mantener la condena por tenencia ilícita de armas. Esta decisión subraya la importancia de la complicidad y la participación activa en actos delictivos.
La ratificación de la sentencia por parte del TSJA refuerza la postura de la justicia aragonesa respecto a la gravedad de los delitos de violencia y el uso ilegal de armas. Además, envía un mensaje claro sobre la determinación de las autoridades judiciales de castigar con severidad aquellos actos que pongan en peligro la vida de las personas, asegurando que tanto autores materiales como cómplices enfrenten las consecuencias legales de sus acciones.