El director de ‘Fuentes Informadas’ desvela en DMAX algunos de los misterios del incendio que calcinó la Torre Windsor

¿Accidente o sabotaje? El nuevo documental, que cuenta con el testimonio de José Antonio Hernández, analiza sus claves y derivadas 18 años después del siniestro

El director de Fuentes Informadas, José Antonio Hernández, ha sido entrevistado por DMAX con motivo de la serie documental ‘La maldición del Windsor’, que desvelará el próximo domingo 12 de febrero a las 22:00h algunos de los misterios que todavía rodean al incendio que sufrió el emblemático y extinto edificio madrileño. ¿Fue un accidente o un sabotaje? En él se realiza una autopsia al cadáver de acero y hormigón en el que se convirtió el icónico edificio, un recorrido por todo lo que desencadenó el incendio más grande de un rascacielos en la historia de España.

Dada la cercanía de Hernández a las investigaciones, las cuales cubrió como periodista en la causa judicial que se acabó denominado ‘caso Windsor’, ha apuntado alguna de las claves de un siniestro marcado por el secretismo.

De la Torre Windsor, uno de los rascacielos más icónicos del skyline de Madrid, solo quedan en la actualidad un misterio sin resolver y multitud de preguntas sin respuesta: ¿pudo una simple colilla causar el incendio? ¿qué fueron las “sombras del Windsor”? ¿qué documentos se guardaban en sus oficinas? ¿a quién comprometían? Cuando se cumplen 18 años del gran incendio televisado que mantuvo en vilo a España durante toda una noche, DMAX presenta ‘La maldición del Windsor’, un nuevo documental de cuatro episodios que investiga sus entresijos.

La serie, que también estará disponible al completo en HBO Max, retrata la noche del 12 de febrero de 2005, una efeméride que coincide con la fecha de su estreno. Cuando cayó el sol, la madrileña Torre Windsor, un edificio de oficinas de más de 100 metros de altura situado en el corazón financiero de la ciudad, empezó a arder hasta quemar por completo su estructura. El país entero pudo contemplar en directo por televisión cómo la icónica edificación quedó reducida a cenizas. Mientras las llamas arrasaban un edificio de 32 plantas, se originaban multitud de preguntas que hoy continúan sin respuesta y que abrieron la puerta a todo tipo de hipótesis.

Con su rápida e inesperada destrucción salieron a la luz la historia de poder y luchas internas de la familia propietaria del edificio: los Reyzábal, una de las familias más ricas del país y de la que se sabe muy poco. Surgieron todo tipo de teorías sobre los conocidos como ‘fantasmas del Windsor‘ y las misteriosas llamaradas azules captadas por las cámaras. Y, finalmente, la aparición en escena de uno de los personajes omnipresentes de la actualidad española que han revelado alguno de los asuntos más turbios y sensibles. Ni más ni menos que el comisario José Manuel Villarejo, quien por medio de sus grabaciones ha evidenciado el funcionamiento de las llamadas “cloacas del Estado”.

Los testimonios de bomberos que participaron en las tareas de extinción, periodistas que cubrieron la noticia como José Antonio Hernández, políticos madrileños, empresarios y los arquitectos que diseñaron la Torre Windsor completan este original relato que aporta luz al caso con intriga, humor y sorprendentes giros de guion. Asimismo, retrata una implacable imagen de la España que acababa de entrar en el fulgurante siglo XXI. Precisamente este domingo se lanzarán los dos primeros capítulos de esta miniserie producida por Producciones del Barrio para Discovery que el canal emitirá durante dos semanas consecutivas.

La investigación sobre un coloso en llamas

Se acababa de declarar el mayor incendio de un rascacielos en la historia de España en la emblemática Torre Windsor. En pocos minutos las llamas se desbocaron por un cúmulo de circunstancias sospechosas: la presión de agua era inexistente, aparecían las mencionadas llamaradas de color azul y el fuego se propagaba de manera descendente en vez de ascendente, como suele ser habitual. Los bomberos no pudieron hacer nada y abandonaron el edificio, que terminó únicamente con su esqueleto de acero y hormigón.

Con el edificio desalojado y los cristales de sus cuatro fachadas reventados por la presión del calor de las llamas, aparecieron unas sombras en una de las ventanas del Windsor… Los conocidos como “fantasmas del Windsor” dieron pábulo a todo tipo de elucubraciones sobre qué o quiénes eran, qué podían estar buscando y, sobre todo, cómo entraron en el edificio.

El incendio del Windsor esconde enigmas que nunca se resolverán. ¿Por qué? Lo descubrirán el próximo domingo.