La investigación comenzó el pasado día 20 tras la incautación de droga en Sanlúcar de Barrameda
Una operación policial llevada a cabo en el marco del Plan Especial de Seguridad para el Campo de Gibraltar ha resultado en la desarticulación de una organización criminal que se dedicaba al tráfico de drogas en la provincia de Cádiz. Esta red, cuya base se encontraba en la localidad de Lebrija, ha sido considerada una de las más activas en la zona.
La investigación, que comenzó el pasado 20 de diciembre tras la incautación de droga en Sanlúcar de Barrameda durante un control de rutina, ha culminado con la detención de 15 personas vinculadas a esta red. Durante el proceso, se logró intervenir un total de 3.388 kilogramos de hachís, así como un fusil de asalto AK-47. Además, en los seis registros realizados se descubrió una plantación de marihuana con 80 plantas, se incautaron cartuchos de armas de fuego y se identificó un patrimonio valorado en 310.000 euros.
El operativo comenzó cuando los agentes se enfrentaron a hasta 16 disparos al intentar detener una furgoneta que transportaba 112 fardos de hachís. A pesar de la resistencia armada por parte de los sospechosos, la furgoneta fue interceptada y se logró la incautación de la droga y el arma de guerra.
Tras este incidente, se llevó a cabo una exhaustiva investigación que permitió identificar a los responsables de la red. Se determinó que habían descargado la droga en un caño del río cercano a Lebrija el día 19 de diciembre, almacenándola en una guardería y planificando su transporte al día siguiente, momento en el que fueron detenidos por las autoridades.
Tres de los detenidos se enfrentan a cargos adicionales por tentativa de homicidio
En el marco del operativo, se realizaron seis entradas y registros en las que se confiscaron elementos relacionados con las actividades delictivas de la organización, así como cartuchos de armas de fuego. Además, se descubrió el mencionado cultivo indoor de marihuana.
Tres de los detenidos enfrentan cargos adicionales por tentativa de homicidio, debido a su presunta participación en los disparos realizados durante la persecución de la furgoneta que transportaba la droga.
La acción fue dirigida por el Juzgado Mixto número cuatro de Sanlúcar de Barrameda y ejecutada por diversas unidades de la Policía Nacional como parte del esfuerzo por combatir el crimen organizado en la región.