“He andado muchos caminos y he abiertos muchas veredas… y en todas partes he visto caravanas de tristeza”… Don Antonio Machado otra vez y siempre alumbrando las perplejidades… Los que felizmente hemos vivido años en Argentina nos duele aquello que pueda hacerle daño y nos alegra cualquier triunfo que encauce el bienestar que allí merecen. Cuando ya ni se esperaba, la justicia ha aparecido: condenan a seis años de cárcel e inhabilitación permanente a la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner.
Nunca sentiré alivio por la cárcel de nadie. En la ley positiva no se ha encontrado mejor remedio para el que delinque que privarle de su libre disponibilidad aunque, a veces, la justicia también se equivoca, pero los humanos somos así de irremediables. Cada vez que paso en la ruta por un Centro Penitenciario recuerdo el mensaje de Delibes: “Los hombres se hacen, las montañas están hechas”. Lástima que un hombre tenga que “hacerse” tras el dolor de una reja. A los condenados por robo, se les debía obligar a que devolvieran lo robado y una gruesa añadidura de intereses.
Cuando no se cultivó bien lo bien sembrado, en Veraluz se condena ese año a regalar la cosecha.
Pedro Villarejo
Debería aplicarse una ley que humaniza, pero la sociedad solo busca recodos en los que encontrar acomodo. Nada podrá ser mejor sin aprender de los que saben. A Pedrouve le basta un minuto para llenarlo todo.
Gracias, querido José Eladio, qué generoso eres.
Un abrazo
Pedro