En el próximo año se diagnosticarán 25.770 nuevos casos de cáncer sanguíneo en España y, por tanto, será el 5º tumor más frecuente, por detrás de los cánceres de mama, pulmón, próstata y colon, según la Sociedad Española de Hematología y Hemoterapia (SEHH) y la Red Española de Registros de Cáncer
Las organizaciones de salud han dado esta información a través del informe Las cifras del cáncer sanguíneo en España: estimaciones de incidencia para 2025 y análisis de supervivencia.
Del total de nuevos casos, 14.258 se diagnosticarán en hombres y 11.397 en mujeres. Las neoplasias linfoides representarán el 71% del total de neoplasias hematológicas estimadas para 2025, con 18.357 nuevos casos.
Las neoplasias linfoides con mayor incidencia serán las neoplasias de células B maduras, que representan el 78 % del total, seguidas del linfoma de Hodgkin (9%), las neoplasias de células T y NK maduras (7%), y de las neoplasias de células precursoras (3%) y neoplasias linfoides inespecíficas (3%).
Dentro de las neoplasias linfoides de células B maduras, la mayor incidencia corresponderá al linfoma difuso de células B grandes (27%), al mieloma múltiple (22%), al linfoma folicular (18%) y la leucemia linfocítica crónica (14%).
Asimismo, las neoplasias mieloides representarán el 28 % de todos los cánceres sanguíneos, con un total de 7.148 nuevos casos, siendo las más frecuentes las neoplasias mieloproliferativas (39%).
El grupo de las neoplasias linfoides se mantiene estable en los últimos años, siendo más frecuentes en hombres que en mujeres y aumentando con la edad.
En el caso de las neoplasias mieloides, se observa un ligero descenso en la incidencia, siendo mayor en los hombres e incrementándose con la edad. Por su parte, las histiocitosis solo representarán el 1% de la incidencia de todas las neoplasias hematológicas, con una estimación de 264 nuevos casos.
La supervivencia global de los cánceres sanguíneos durante el período analizado en el informe (2009-2018) fue del 62,1 %. Dentro de este grupo, las neoplasias linfoides mostraron un mejor pronóstico, con una supervivencia a los cinco años del diagnóstico del 67,9 %, en comparación con el 49,5 % observado en las neoplasias mieloides.
Las mujeres tuvieron tasas de supervivencia más altas, con un 66,1 %, en comparación con el 59 % registrado en los hombres para el conjunto de estos tumores.
“Dado que los tumores líquidos son extremadamente heterogéneos, se observaron grandes variaciones en la supervivencia entre los diferentes subgrupos”, señala el facultativo de la Unidad de Epidemiología y Registro de Cáncer de Girona (ICO-Girona) y coordinador del grupo de investigación HematoREDECAN, Rafael Marcos-Gragera.