¿Qué ayuda cuando tienes un resfriado o gripe?

28 de diciembre de 2025
4 minutos de lectura
Remedios caseros contra la gripe y la tos

La vitamina C, el saúco o el zinc podrían ayudar a estimular el sistema inmunitario y reducir ligeramente la duración de los síntomas

Llega de nuevo la temporada en la que las narices congestionadas y las toses se multiplican. La mejor protección contra la gripe o la Covid sigue siendo la vacunación. Frente al resfriado común y otras infecciones respiratorias, las opciones son más limitadas, especialmente cuando la enfermedad ya está en curso. La mayoría están causadas por virus, por lo que no responden a antibióticos, fármacos indicados para infecciones bacterianas.

Existen tratamientos como Paxlovid para Covid y antivirales como Tamiflu para la gripe. Sin embargo, estos últimos suelen reservarse para personas con riesgo de complicaciones graves, como embarazadas, mayores o inmunodeprimidas. Para el resto, la recomendación médica es descansar y dejar que los síntomas remitan.

En la gripe estos incluyen fiebre, cefalea, dolores musculares, congestión o goteo nasal durante tres a cinco días. Puede haber tos, dolor de garganta y fatiga, que a veces se prolongan un poco más, explicó el Dr. H. Keipp Talbot, profesor de medicina en la Universidad de Vanderbilt.

Muchas personas llaman “gripe” a cualquier malestar invernal, apuntó el Dr. Talbot. Pero el resfriado suele aparecer más lentamente, es más leve y rara vez provoca complicaciones. En Covid también hay síntomas respiratorios y la prueba diagnóstica es la forma más fiable de diferenciarlo. La Dra. Aviva Romm recordó un viejo dicho:

«Si tratas un resfriado, desaparece en siete días; si lo dejas así, desaparece en una semana»

Según informa El Diario de Chihuahua, durante generaciones se han utilizado remedios caseros como infusiones, sopas o hierbas para aliviar molestias como la congestión o el dolor de garganta. Los estudios científicos sobre su eficacia suelen ser pequeños o con resultados limitados. Aun así, los expertos coinciden en que, si hacen sentir mejor al paciente, pueden ser útiles. Se debe acudir a un profesional si los síntomas empeoran, dificultan respirar o no mejoran tras más de una semana. Afirmó la Dra. Romm:

«A veces no tenemos evidencia de muchas prácticas tradicionales comunes porque no hay valor económico en estudiarlas, pero tenemos miles de años de datos anecdóticos y tenemos suficiente evidencia para demostrar su seguridad»

Vitamina C, saúco y zinc

Existe cierta evidencia de que la vitamina C, el saúco o el zinc podrían ayudar a estimular el sistema inmunitario y reducir ligeramente la duración de los síntomas. La vitamina C se popularizó en los años 70 gracias a Linus Pauling. Estudios posteriores han sugerido beneficios en funciones inmunológicas. Su eficacia sigue en debate porque el cuerpo no almacena grandes dosis y elimina el exceso en la orina. Un metanálisis de 2013 indica que tomarla de forma regular, incluso antes de enfermar, puede acortar el resfriado alrededor de un día. Tomarla después de iniciados los síntomas no muestra beneficios consistentes.

Además, el saúco, presente en jarabes infantiles para resfriado y gripe, ha mostrado reducir síntomas si se toma al inicio del cuadro. La evidencia aún es limitada. Contiene antioxidantes y antocianinas que favorecen la respuesta inmune. En el caso del zinc, jarabes o pastillas cada tres o cuatro horas podrían reducir la duración del resfriado uno o dos días al interferir con la replicación viral.

Sin embargo, otros análisis no concluyen ventajas frente al placebo. El zinc puede causar efectos adversos como pérdida del olfato en aerosoles nasales o sabor metálico. Conviene tomarlo con alimentos para evitar náuseas, señaló la Dra. Romm.

Hidratación y dolor de garganta

El dolor de garganta surge por inflamación del sistema inmune frente al virus. Esto dificulta la ingesta y la hidratación, agravando la molestia. Mantener una buena ingesta de líquidos, ayuda a aliviar. El jengibre es un remedio muy habitual en infusiones o caldos y algunos estudios le atribuyen propiedades antiinflamatorias.

También la cúrcuma podría reducir inflamación, aunque su absorción es baja y los suplementos varían en concentración. Consumirla con grasas o leche tibia mejora su absorción; la pimienta negra la potencia aún más, indicó la Dra. Romm. “El jengibre y la cúrcuma juntos son una combinación realmente muy agradable”, añadió. Ella misma prepara té con ambos ingredientes cuando tiene dolor de garganta.

Agua salada y miel

Si la tos empeora el malestar, los gárgaras con agua tibia y sal, media cucharadita por vaso, pueden aflojar mucosidad y eliminar irritantes. Este método también reduce inflamación y cubre los tejidos con agua templada, explicó el Dr. Talbot. La miel en infusiones o incluso añadida a los gárgaras actúa como demulcente, recubriendo y calmando la garganta. En estudios con niños, dos cucharaditas de miel antes de dormir redujeron la tos nocturna tanto como el dextrometorfano. No debe darse a menores de un año por riesgo de botulismo infantil.

Congestión nasal

Mantener las fosas nasales húmedas ayuda a aliviar la congestión. Puede hacerse con humidificador, inhalación de vapor con hierbas o lavados nasales con solución salina templada. La irrigación nasal con Neti Pot tiene tradición milenaria en medicina ayurvédica. Un estudio de 2019 sugiere que puede acortar la duración del resfriado y reducir el contagio. Debe usarse solo agua hervida, destilada o esterilizada para evitar infecciones. Los aerosoles salinos comerciales son una alternativa práctica.

Además, la Dra. Hind Fadel, especialista en enfermedades infecciosas de Mayo Clinic, mantiene un humidificador en casa durante la temporada de gripe. Sus investigaciones muestran que niveles de humedad entre 40% y 60% reducen la transmisión viral. “Con esa humedad se encuentra menos virus en superficies y aire, y el virus presente es menos viable”, afirmó. Si el humidificador no indica humedad, un higrómetro económico permite controlarla. Aunque faltan estudios concluyentes sobre su capacidad para acortar la enfermedad, mejora tos y congestión.

En cuanto al mentol, genera sensación de respiración más libre. Ungüentos como Vicks VapoRub pueden aplicarse en cuello o pecho y algunos estudios apuntan que mejoran el sueño. Puede irritar en ciertos casos. También se pueden inhalar vapores con eucalipto o tomillo, vertiéndolos en agua caliente y respirando el vapor con precaución, o colgar hierbas en la ducha.

Conviene recordar que algunos descongestionantes orales no han demostrado eficacia según la FDA. Finalmente, cada persona debe probar hasta encontrar lo que mejor alivie sus síntomas. Para la Dra. Romm, ese alivio “vale la pena”.

No olvides...

¿Cómo comer si usas inyecciones para bajar de peso?

Los síntomas digestivos funcionan muchas veces como una señal de alerta de que algo ha sido excesivo…

La gripe empieza a remitir en varias comunidades en plenas Navidades, pero Sanidad pide extremar la precaución

El objetivo es proteger especialmente a los colectivos más vulnerables, como las personas mayores o los pacientes crónicos…

Dos alimentos que deberíamos evitar incluso en Navidad

El mensaje es sencillo: disfrutar de una celebración no tiene que ir necesariamente acompañado de una copa en la mano…

Los hábitos diarios que están arruinando tus dientes sin que lo sepas

Un error frecuente es cepillarse con demasiada fuerza o usar cepillos de cerdas duras Mantener dientes y encías sanos no…