Hoy: 23 de noviembre de 2024
La Audiencia Provincial de Almería acoge desde este lunes el juicio contra una mujer de 42 años acusada de asesinar a su bebé recién nacido en el domicilio de Vícar (Almería). La acusada dio a luz al bebé, enterró su cuerpo y se desprendió de otros restos como la placenta, la cual arrojó a una balsa de riego, según informa Europa Press.
La Fiscalía pide para la mujer una pena de prisión permanente revisable por un delito de asesinato en grado de consumación, concurriendo la agravante de parentesco, de modo que será un jurado popular el que se encargue de analizar los testimonios y pruebas que se expondrán durante los cinco días que está previsto que dure la vista oral.
En este sentido, durante la primera sesión del juicio que dirigirá el magistrado-presidente, Jesús Miguel Hernández, se espera la constitución del jurado así como la declaración de la acusada, quien permanece en prisión provisional por los hechos que tuvieron lugar el 7 de marzo de 2020.
Según consta en el auto de los hechos, la acusada habría dado a luz a un bebé que nació “vivo” en su vivienda, después de ocho o nueve meses de gestación. Habría sido pocos instantes después, “con intención de causarle una muerte cierta”, cuando le habría “asfixiado con sus manos”.
El jurado deberá determinar estos hechos así como la presunta acción posterior de la mujer, quien conforme a las acusaciones habría enterrado el cuerpo del recién nacido “junto a la puerta de su vivienda, debajo de un gran bidón“, “sin comunicarlo en ningún momento ni a sanitarios ni a autoridades policiales”.
La Guardia Civil encontró posteriormente la placenta dentro de una bolsa arrojada a una balsa de riego próxima a la vivienda de la acusada, quien ingresó en prisión provisional tras ser detenida por estos hechos. La investigación se centró en buena parte en determinar si la muerte del bebé se produjo durante el alumbramiento o en el transcurso de las horas posteriores.
En este sentido, se prevé la declaración de siete testigos y una docena de agentes de la Guardia Civil que han participado en el esclarecimento del caso, así como de forenses que se encargaron de realizar la autopsia del neonato.
Además de la máxima pena prevista en el Código Penal, la Fiscalía solicita para la acusada una medida de libertad vigilada de diez años y una indemnización para el padre de la menor de 120.000 euros, quien ejerce la acusación particular y le imputa a la mujer un presunto delito de asesinato con alevosía y premeditación.