La cantante tiene entre manos un nuevo proyecto: seis meses después de su última aparición en el programa, presenta su tercer álbum, ‘Alpha’
Aitana visitó el programa ‘El Hormiguero’ el miércoles 20 de septiembre para disfrutar y compartir anécdotas con Pablo Motos. Cada vez que asiste, la joven se divierte como una niña y comparte muchas historias.
La talentosa cantante tiene entre manos un nuevo proyecto y seis meses después de su última aparición en el programa, presenta su tercer álbum, ‘Alpha’. La artista comenta que esta atravensando por un buen momento, tanto en su carrera como en su vida personal. Aunque prefiere mantener su relación en privado, la española disfrutó junto a Sebastián Yatra de un verano lleno de amor digno de una película romántica.
Durante su intervención en el programa, Aitana compartió una de sus características anécdotas de viaje con su timidez habitual. Mencionó que en un viaje a México, sufrió una desagradable experiencia conocida como el “mal de Moctezuma”, que suele ocurrir al consumir agua o alimentos muy condimentados. Lo curioso es que Aitana enfermó justo antes de tomar un vuelo a Miami, ciudad que en ese momento estaba siendo azotada por un huracán. De manera humorística, la cantante mencionó un incidente viral relacionado con la diarrea en un avión, asegurando que no quería que la confundieran con esa situación.
Durante este verano, la artista vivió una serie de acontecimientos. Además de obtener su licencia de conducir, Aitana experimentó un incidente con su perra Sopa. Durante uno de los viajes que realizó, alguien dejó la puerta de la villa abierta, lo que permitió que “Sopa, que es una traicionera”, se escapara y se introdujera en otra residencia. Aitana compartió, angustiada, que cuando finalmente lograron encontrar a Sopa, esta tenía un gallo en la boca. La artista confesó su preocupación porque no quería que ningún gallo resultara herido, pero, al mismo tiempo, Sopa parecía estar muy emocionada.
Aitana y sus amigos contactaron a los dueños del gallo para pedir disculpas, dado que ellos consideraban al gallo como su mascota. La experiencia fue muy angustiante para la artista, quien también destacó la suerte de que Sopa no lastimara a ninguno de los gatos presentes en la casa. En este momento, Aitana aprovechó para pedir disculpas nuevamente.