Hoy: 14 de diciembre de 2024
El amor es un sentimiento que no tiene límites porque amar, más allá de un fenómeno biológico, psicológico o sociológico, tiene mil formas de sentirse. Aunque a menudo se han distinguido entre diferentes tipos de amor, como el amor propio, el amor romántico, el amor de amistad, el amor a Dios y el amor al prójimo. Psicólogos y neurocientíficos diferencian hasta 27 tipos de amor.
Entonces, ¿cómo saber si es amor de verdad? Al parecer investigadores finlandeses de la Universidad Aalto han analizado las emociones y los mecanismos neuronales y de comportamiento hasta descubrir dónde se siente el amor, o mejor dónde tu cuerpo experimenta este sentimiento dependiendo del tipo de amor.
Carecemos de conocimiento empírico sobre cómo se experimentan los diferentes tipos de amor como sentimientos encarnados y cómo estas experiencias se relacionan entre sí. Sin embargo, lo investigadores han elaborado un mapa de en qué parte del cuerpo se sienten los diferentes tipos de amor y con qué intensidad se experimentan.
Hay que decir que su primer descubrimiento, no muy sorprendente, señala que los tipos de amor asociados con las relaciones cercanas son similares en su forma de sentir y son los más experimentados. Y por otro lado, sus hallazgos, publicados en ‘Philosophical Psychology’, sugieren que los diferentes tipos de amor se forman o sienten de más débil a más fuerte.
El equipo encuestó a los participantes sobre cómo experimentaban 27 tipos diferentes de amor, como el amor romántico, el amor sexual, el amor de los padres y el amor por los amigos, los extraños, la naturaleza, Dios o ellos mismos. El equipo preguntó a los participantes dónde sentían los diferentes tipos de amor en sus cuerpos y qué tan intenso era el sentimiento física y mentalmente.
Para construir el mapa, los investigadores recopilaron datos de cientos de participantes a través de una encuesta en línea. La mayoría de las respuestas provinieron de mujeres jóvenes en educación superior. Se pidió a los participantes colorear una silueta corporal para mostrar dónde sentían cada tipo de amor. Los participantes describieron sensaciones físicas y emocionales, evaluaron el agrado y conectaron con el contacto físico. Finalmente, se les pidió calificar la cercanía de los tipos de amor.
“El amor entre personas se divide en sexual y no sexual. Los tipos de amor más cercanos son aquellos que tienen una dimensión sexual o romántica. También fue interesante encontrar una fuerte correlación entre la intensidad física y mental de la emoción y su agrado. Cuanto más fuerte se siente un tipo de amor en el cuerpo, más fuerte se siente en la mente y más placentero es”, ha señalado filósofo Pärttyli Rinne, quien coordinó el estudio.
El equipo estaba intrigado por el hecho de que todos los diferentes tipos de amor se sienten en la cabeza. Mientras cuando se pasa de un amor más experimentado a un tipo amor menos experimentado, las sensaciones en la zona del pecho se debilitan. “Puede ser que, por ejemplo, el amor por los extraños o la sabiduría estén asociados a un proceso cognitivo. También puede ser que haya sensaciones agradables en la zona de la cabeza. Esto es algo que debería investigarse más a fondo”, ha afirmado Rinne.
Rinne también señala que existen diferencias culturales en el amor y que la demografía del grupo de estudio está vinculada a la experiencia del amor. Si el mismo estudio se hiciera en una comunidad altamente religiosa, el amor a Dios podría ser el amor más intensamente experimentado de todos. En el estudio cerebral actual, si los participantes fueran padres en una relación, el amor por los niños podría ser la forma más intensa de amor.
Los sentimientos medios más positivos y sentidos fueron para el amor sexual, romántico, recíproco, verdadero y apasionado. En promedio, el tiempo más corto en el que si sintió la experiencia del amor fue el amor a la naturaleza, y el tiempo más largo es el amor a Dios. Los sujetos informaron que tienen el menor control sobre los tipos de amor relacionados con las relaciones de parentesco (el amor del padre y de la madre por su hijo, el amor de los padres). El tipo de amor que uno experimentaba con menos fuerza era el amor propio.
Mientras que los que los tipos de amor relacionados con la sexualidad (sexual, apasionado, romántico) tenían fuertes sentimientos corporales. Los que más se sentían en todas las partes del cuerpo, desde la cabeza hasta el estómago y con mayor intensidad. Estos tres tipos de amor también obtuvieron las calificaciones más altas en cuanto a su conexión con el contacto corporal, incluyendo 27 estímulos relacionados.
En resumen, las zonas corporales más notables en la experiencia subjetiva de diversos tipos de amor son el pecho y la cabeza, posiblemente relacionadas con cambios fisiológicos y emocionales. Por otro lado, los sentimientos asociados con tipos de amor más débiles tienden a concentrarse en la cabeza. Esto puede deberse a que los sujetos asocian conceptos más abstractos como sabiduría o moralidad con el cerebro y funciones cognitivas superiores.