Hoy: 26 de diciembre de 2024
La citisina, una ayuda genérica de bajo coste para dejar de fumar que se utiliza en Europa del Este desde los años sesenta, multiplica por más de dos las probabilidades de dejar de fumar con éxito en comparación con el placebo y puede ser más eficaz que la terapia de sustitución de nicotina, según un nuevo estudio publicado en la revista Addiction.
Su perfil de seguridad es benigno y sin indicios de problemas graves, pero la citisina no está autorizada ni se comercializa en la mayoría de los países fuera de Europa central y oriental, por lo que no está disponible en la mayor parte del mundo, incluidos muchos países de renta baja y media donde podría suponer una gran diferencia para la salud mundial.
Se trata de un compuesto de origen vegetal que alivia los síntomas de abstinencia del tabaco. Se sintetizó por primera vez en Bulgaria en 1964 con el nombre de ‘Tabex’ y posteriormente se extendió a otros países de Europa del Este y Asia, donde sigue comercializándose. En 2017, la empresa farmacéutica polaca Aflofarm empezó a venderla como ‘Desmoxan’, un medicamento de venta con receta, y Canadá la aprobó como producto de salud natural de venta libre, ‘Cravv’.
Dado que la citisina es un medicamento de bajo coste, podría formar parte de un plan para aumentar la accesibilidad de los fumadores a la terapia farmacológica, que tiende a ser limitada en los países de ingresos bajos y medios.
El autor principal del estudio, el doctor Omar Di Santi, del Centro Nacional de Intoxicaciones (CNI) de Argentina, destaca que el estudio se suma a las pruebas de que la citisina es una ayuda eficaz y barata para dejar de fumar. “Podría ser muy útil para reducir el consumo de tabaco en los países de ingresos bajos y medios, donde se necesitan urgentemente fármacos rentables para dejar de fumar”, asegura.
Recuerda que “en todo el mundo, el tabaquismo se considera la principal causa de muerte evitable. La citisina tiene el potencial de ser una de las grandes respuestas a ese problema”, subraya.
Este estudio agrupó los resultados de ocho ensayos controlados aleatorizados que compararon la citisina con el placebo, con casi 6.000 pacientes. Los resultados combinados demostraron que la citisina multiplica por más de dos las posibilidades de dejar de fumar con éxito en comparación con el placebo.
La investigación también analizó dos ensayos controlados aleatorios que comparaban la citisina con la terapia de sustitución de nicotina y la vareniclina; con resultados, en ambos casos, a favor de la citisina.