La vida en el PSOE se ha convertido en un sinvivir y un escándalo sucede a otro. El último ha llegado mientras se celebra el Comité Federal que el presidente Pedro Sánchez ha convocado para hacer los ajustes necesarios en el partido para sacar la cabeza del agua. Sánchez se ha encontrado con problemnas varios y entre ellos al secretario general del PSOE de Castilla La Mancha y presidente de la comunidad, Emiliano García Page, quien ha pedido al líder nacional que se someta a una cuestión de confianza en el Congreso o convoque elecciones generales anticipadas porque ve insuficientes las medidas planteadas en el Comité Federal de este sábado, informa EP.
Según trasladan fuentes del entorno de Page, durante su intervención ante Sánchez ha señalado que esta es la crisis de corrupción más grave en democracia para el Partido Socialista y no se va a superar con las medidas planteadas por Sánchez en este Comité Federal.
Así, ha indicado que o se recupera la confianza parlamentaria que se ha perdido, y no a cambio de más «chantajes de los independentistas» en referencia a los acuerdos alcanzados con ERC y especialmente Junts durante la legislatura a cambio de unos votos imprescindibles para mantener al Gobierno, o Sánchez debe convocar elecciones anticipadas.
Pero los problemas crecen en el partido sanchista y justamente otra persona de confianza del líder socialista que estaba previsto nombrar dentro de la trilogía para asumir las funciones que tenía Santos Cerdán ha sido apartado por «comportamientos inadecuados con las mujeres».
Sánchez ya lo había señalado para el puesto cuando han llegado varias denuncias de mujeres que han trabajado con él que lo acusan de «machista», «baboso» y de «comportamientos inadecuados». Nuevo parapalo de realidad que deja en shock a los socialistas en su reunión de organización interna y nuevo aviso para que Pedro Sánchez mejore su ‘ojo clínico’ para los nombramientos, hasta ahora muy defectuoso con los íntimos Ábalos y Cerdán.
Sánchez elude de nuevo asumir responsabilidades por los nombramientos fallidos de Ábalos y Cerdán y tampoco por este último de Francisco Salazar. Se limita a decir que «tiene el corazón tocado» y que está determinado a seguir.
El dirigente socialista Francisco Salazar, que iba a ser nombrado por el Comité Federal del PSOE de este sábado como adjunto a la secretaría de Organización, ha pedido ser apartado de sus funciones tras las informaciones que le acusan de tener comportamientos inadecuados contra mujeres que trabajaban en su equipo, pero en realidad ha sido la dirección socialista quien le ha informado que no no puede acceder al puesto para el que habñía sido propuesto
Las noticias conocidas esta mañana han sido adelantadas por ‘eldiario.es’ y tras publicarse y llegar como un ciclón al comité wsocialista Salazar ha pedido «ser apartado de sus funciones actuales en la Comisión Ejecutiva Federal». Al parecer ha justificado la decisión «para no hacer dañoal partido».
Salazar, íntimo del presidente Pedro Sánchez, forma parte del círculo de confianzo del líder socialista y estaba llamado a ser una de las tres personas que asumira la responsabilización de Organización en el PSOE , cargo que ocupaba Santos Cerdán hasta verse involucreado en casos de corrupción que lo han llevado a prisión.
Asimismo señalan que la Ejecutiva iniciará estas diligencias, de inmediato, aunque subrayan que en el PSOE «no constan denuncias al respecto en ninguno de los canales habilitados».
Además de ser nombrado para formar parte del nuevo equipo de Organización, tras el cese de Santos Cerdán por un caso de presunta corrupción, Salazar forma parte del equipo del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez en La Moncloa.
Al parecer el nombramiento se ha paralizado tras llegar varias denuncias de mujeres socialistas que acusan a Salazar de «baboso» y comportamientos inadecuados con las mujeres propios de un «machista».
Precisamente el secretario general del PSOE y presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha trasladado a las secretarias de Igualdad de los territorios y portavoces de Igualdad en las Cortes, que se cambiará el Código Ético del PSOE para expulsar a todos los ‘puteros’.
Según ha informado el partido en un comunicado tras la reunión a puerta cerrada de Sánchez con las responsables de Igualdad, se añadirá un párrafo al artículo 4.5 del Código Ético del PSOE que concluye que «solicitar, aceptar u obtener un acto sexual de una persona a cambio de una remuneración se considera absolutamente incompatible con la militancia en el PSOE y los órganos federales tramitarán estos casos como una falta muy grave de acuerdo a los Estatutos Federales imponiendo, además, la máxima sanción, que es la expulsión del partido».
El texto añade que desde el PSOE consideran que el sistema prostitucional es una «expresión de violencia contra las mujeres» e incompatible con los principios de los derechos humanos y la ética democrática, ya que «implica tratar a las mujeres como objetos o mercancías y no como sujetos de derechos».
«Nos declaramos abolicionistas de la prostitución porque defendemos un modelo social que luche por la desaparición de las causas que obligan a las mujeres a prostituirse, por ser incompatible con el modelo social que proponemos, de igualdad y de respeto a la dignidad de las personas, y de defensa de los derechos humanos de las mujeres», subraya la nueva redacción del Código Ético.
Si hay una palabra que defina las sensaciones en las que el PSOE afronta este sábado su Comité Federal es temor porque el miedo a nuevas revelaciones en el ‘caso Koldo-Ábalos’ y Santos Cerdán permanecen en el presidente y en el conjunto de la organización socialista, empañada en curas de urgencia para la situción que no cierran una profunda herida abierta por la corrupción.
En las filas del partido está extendido el temor a que nuevas revelaciones den al traste con la renovación y desactiven su efecto, sio es que lo va a tener y menos tras el nuevo asuntillo de Francisco Salazar.
Sánchez ha adelantado trabajo y en los días previos ha despejado las entradas y salidas más relevantes en su nueva dirección para dejar espacio a su discurso político en el que va a reiterar su intención de resistir y dar la batalla ante el escenario complicado que le queda por delante, según indican fuentes socialistas.
El Comité Federal -máximo órgano del partido entre congresos- se celebra mientras el exsecretario de Organización Santos Cerdán se encuentra en prisión preventiva en la cárcel de Soto del Real por encabezar presuntamente una trama de cobro de mordidas por adjudicaciones ilegales de obra pública.
El caso también afecta a su antecesor en Organización, el también exministro de Transportes, José Luis Ábalos y el exasesor ministerial Koldo García, el «triángulo tóxico» en el que Ferraz y Moncloa quieren acotar la trama.
Sin embargo, fuentes del PSOE con importantes responsabilidades admiten a Europa Press el miedo que reina en el partido a que las investigaciones policiales y judiciales rompan la barrera de ese triángulo y salpiquen a otros cargos.
De hecho consideran que es un escenario probable en base a las actuaciones llevadas a cabo por el magistrado del Tribunal Supremo encargado del caso, que sigue investigando y ha dejado por escrito sus sospechas de que otras personas «físicas y jurídicas» obtuvieron beneficio de las mordidas.
Preocupan especialmente los vínculos que la trama haya podido tener en varios territorios como Navarra, donde ya ha caído el número dos del PSOE Ramón Alzórriz por la relación de su entorno familiar con una de las empresas investigadas.