Hoy: 22 de noviembre de 2024
Daniel Sancho, ciudadano español, se ha declarado “preparado para lo mejor y para lo peor” mientras espera la sentencia que el 29 de agosto determinará si es culpable del asesinato premeditado del cirujano colombiano Edwin Arrieta, ocurrido en una isla de Tailandia el año pasado.
En una entrevista concedida a la agencia EFE el 22 de agosto desde la prisión de Samui, en el sur de Tailandia, Sancho expresó su optimismo y confianza en que el juez descartará la acusación de asesinato premeditado. Mantiene que la muerte de Arrieta fue un accidente.
Según Sancho, las pruebas forenses presentadas por su defensa demuestran que el fallecimiento resultó de una pelea y no de un acto premeditado.
Sancho, de 30 años, ofreció estas declaraciones durante una visita en la prisión, a través de un cristal y un teléfono, sin permitir grabaciones ni toma de notas.
Tras más de un año en prisión preventiva, admitió que la espera para conocer la sentencia ha sido especialmente difícil, describiendo los meses desde el juicio, que concluyó en mayo, como “muy largos”.
Recordó que, hasta el juicio, se sentía “un hombre con una misión”, dedicado a preparar su defensa y participando activamente en el proceso, incluso formulando preguntas a los testigos con el permiso del juez.
Durante el juicio, que se desarrolló a puerta cerrada entre el pasado 9 de abril y el 2 de mayo en el Tribunal Provincial de Samui, Sancho defendió que la muerte de Arrieta fue un accidente ocurrido durante una pelea en la que él actuó en defensa propia ante un supuesto intento de agresión sexual.
Sin embargo, la Fiscalía presentó pruebas que incluían la compra de armas blancas para sostener la acusación de asesinato premeditado y desmembramiento del cuerpo de Arrieta, cuyos restos fueron hallados en la isla de Phangan. La autopsia del cirujano colombiano no pudo ser concluyente debido a la falta de partes vitales del cuerpo.
La sentencia se dará a conocer el 29 de agosto, en un evento que se anticipa con gran cobertura mediática. Según fuentes de la defensa, el fallo ya ha sido redactado y está pendiente de aprobación final.
En Tailandia, el código penal contempla penas que van desde 15 años de prisión hasta la pena de muerte por asesinato, aunque esta última rara vez se aplica. Sancho también enfrenta cargos adicionales por mutilación del cadáver y ocultación del pasaporte de la víctima.
El acceso al tribunal será restringido, pero se espera la presencia de los padres de Sancho, el actor Rodolfo Sancho y la analista de inversiones Silvia Bronchalo, además de representantes legales de ambas partes y el fiscal.
La familia de Arrieta ha decidido no asistir al tribunal ni emitir declaraciones previas a la sentencia.