Hoy: 22 de diciembre de 2024
En el marco de la operación “Raviches-Severed Ear“, la Guardia Civil ha investigado a 58 propietarios de rehalas de perros por presuntamente mutilar ilegalmente a 1.111 canes, a los que les amputaron las orejas y las colas en las provincias de Almería, Granada, Málaga, Jaén, Córdoba y Sevilla.
La operación “Raviches-Severed Ear” ha permitido la detención de un veterinario en Úbeda (Jaén), sospechoso de cometer un delito continuado de falsedad documental y otro relacionado con la protección de la flora, fauna y animales domésticos por maltrato animal. Este individuo legitimó legalmente las mutilaciones llevadas a cabo por los rehaleros. Además, registró en las cartillas sanitarias de los animales la anotación “Corte de orejas y rabo por funcionalidad bajo anestesia”, sin examinar a ninguno de estos perros ni proporcionar un informe que justificara tales intervenciones.
El inicio de la investigación se remonta un año atrás, cuando el Seprona realizó inspecciones en una rehala de perros en Picena y Domingo Pérez, ambas localidades en Granada. Durante estas inspecciones, se encontraron 26 perros con cortes en orejas y rabos, anotados en sus cartillas sanitarias bajo la mencionada justificación, firmados y sellados por el veterinario de Úbeda, sin documentación adicional que explicara médicamente dichas intervenciones.
En una inspección separada en Cazalla de Sierra, Sevilla, otra unidad del Seprona descubrió varias rehalas con perros también mutilados de la misma manera. La sospecha surgió al notar que los perros eran crías, y las fechas de las intervenciones registradas en sus cartillas no coincidían con las lesiones recientes observadas, con discrepancias temporales.
Las unidades del Seprona de Granada y Sevilla coordinaron esfuerzos en la inspección de distintas zonas de Andalucía. Rastrearon a más de 2.000 perros e identificaron a más de 1.111 de ellos presuntamente mutilados ilegalmente. Como resultado, investigaron a 58 personas por presunta participación en delitos continuados de maltrato animal, falsificación documental e intrusismo profesional.
De estos investigados, 15 pertenecen a Granada, 18 a Jaén, 12 a Sevilla, seis a Córdoba, cuatro a Almería y tres a Málaga. El Seprona ha detectado irregularidades notables en las cartillas sanitarias, especialmente en las fechas de intervención quirúrgica de algunos perros. Reflejan datos inconsistentes con la realidad. Además, constata que las instalaciones veterinarias no cumplían con los estándares mínimos para llevar a cabo estas operaciones con garantías.
A partir del 1 de febrero de 2018, la prohibición total de cortar orejas y rabos en perros de rehala, una práctica tradicional para prevenir daños durante la caza, coincidió con la ratificación del Convenio del Consejo de Europa sobre protección de animales de compañía en España. Dichas mutilaciones por motivos estéticos o sin utilidad alguna están terminantemente prohibidas.
El delito de maltrato animal con lesiones conlleva penas de hasta 18 meses de prisión o multa de hasta 12 meses, además de la inhabilitación para cualquier actividad relacionada con animales. Las investigaciones continúan bajo el mando del Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil en Sierra Nevada (Granada) y Cazalla de la Sierra.