Hoy: 23 de noviembre de 2024
Un hombre de 39 años de origen argelino ha aceptado una condena de dos años de cárcel por apuñalar trece veces en el brazo al novio de su hija después de una discusión en una residencia de Llucmajor. El acusado se declaró culpable en el juicio que tuvo lugar el pasado martes en Vía Alemania, Palma, admitiendo su responsabilidad en un delito de lesiones graves y otro de coacciones.
Los hechos juzgados ocurrieron alrededor de las 18:00 horas del 18 de julio en una vivienda ubicada en la calle Torrent de Llucmajor. El hombre, que ya tenía una orden de alejamiento de su expareja debido a condenas previas por delitos de amenazas, lesiones y maltrato, irrumpió en su domicilio con un cuchillo de gran tamaño.
El agresor proclamó su desesperación frente a su expareja y sus siete hijos, afirmando que no podía vivir sin ellos y amenazando con quitarse la vida. Luego, comenzó a autolesionarse, infligiéndose múltiples heridas superficiales hasta que el novio de una de sus hijas intentó detenerlo. En ese momento, el acusado apuñaló al hombre tres veces en la parte superior del brazo izquierdo. La víctima requirió 56 puntos de sutura y las heridas tardaron 13 días en sanar.
Inicialmente, la Fiscalía solicitó una condena de cinco años de prisión por los delitos de lesiones graves, quebrantamiento de condena y coacciones. Sin embargo, la representante del Ministerio Público llegó a un acuerdo con la abogada de la defensa y la letrada de la acusación particular, reduciendo la pena a dos años de prisión. La defensora del acusado, quien había estado en prisión provisional desde el momento del ataque, solicitó su liberación, y la jueza no se opuso a dicha petición.