Hoy: 25 de noviembre de 2024
El avión ucranio que transportaba 11 toneladas de armas se estrelló la pasada noche del sábado en Kavala, Grecia, mientras volaba de Serbia con destino a Bangladesh.
El piloto del avión siniestrado, informó acerca de un fallo en un motor y solicitó autorización para realizar un aterrizaje de emergencia. Sin embargo, el incendio originado en uno de los propulsores evitó que la aeronave lograse alcanzar los aeropuertos de Thessaloniki o Kavala. Poco después se estrelló.
Las autoridades griegas han informado del fallecimiento de las ocho personas que se encontraban a bordo del avión. Sin embargo, el ejército, los expertos en explosivos y el personal de la Comisión de Energía Atómica de Grecia aún no se han acercado a la zona siniestrada hasta que se considere segura.
Por el momento y como medida preventiva, los servicios de emergencia están empleando drones para inspeccionar los restos de la aeronave, un Antonov An-12 de propiedad ucraniana.
“Hay humo y calor intenso, además de una sustancia blanca que no reconocemos, por lo que un equipo especial de las fuerzas armadas tiene que informarnos de qué se trata y si podemos ingresar al sitio”, explicó Marios Apostolidis, teniente general de la Brigada de Bomberos del Norte de Grecia.
Según relatan algunos vecinos, el avión ya estaba en llamas cuando sobrevolaba la ciudad de Kavala en torno a las 22:45 hora local. “Estaba cubierto de humo, hacía un ruido que no puedo describir y pasó por encima de la montaña. Luego giró y se estrelló en el campo”.
Debido a las constantes explosiones y los temores por una posible carga tóxica, las autoridades han solicitado a los vecinos cercanos a la zona que permanezcan en sus casas hasta nuevo aviso.