La Guardia Civil ha arrestado a tres personas en el marco de una operación antiterrorista internacional contra un grupo vinculado a Hezbolá. Este operativo, desarrollado en Barcelona, también ha resultado en detenciones en Reino Unido y Francia.
La intervención se ha llevado a cabo en un apartamento de la calle Valencia. En este mismo lugar, el pasado julio, fueron detenidos tres presuntos terroristas acusados de fabricar más de mil drones para Hezbolá, tras adquirir los componentes en diversas empresas de España y otros países europeos.
La operación está dirigida por Francisco de Jorge, magistrado del juzgado central de instrucción número 1 de la Audiencia Nacional, quien tiene previsto interrogar a los detenidos el próximo jueves.
A primera hora de la mañana, los agentes irrumpieron en el domicilio situado en el barrio de la Sagrada Familia, donde efectuaron al menos una detención. La inspección del inmueble concluyó alrededor de las 10:30 horas. Según adelantó el diario digital El Nacional, los investigadores se llevaron varias bolsas con documentación para su posterior análisis.
Fuentes próximas a la investigación han señalado que este operativo contra el terrorismo islamista, vinculado a Hezbolá, representa la culminación de las actuaciones llevadas a cabo en Barcelona y Badalona en julio de 2024.
En aquella fase de la operación, la Guardia Civil detuvo a tres personas bajo la dirección de la Audiencia Nacional. Tras comparecer ante el juez Santiago Pedraz, se decretó prisión provisional para uno de los arrestados, mientras que los otros dos quedaron en libertad con medidas cautelares, incluyendo comparecencias periódicas, retirada del pasaporte y prohibición de salir de España.
El individuo que ingresó en prisión el pasado verano es un ciudadano libanés acusado de colaborar con Hezbolá mediante la compra en España de “materiales susceptibles de convertirse en armas de guerra”, con posible uso contra objetivos civiles y militares en Israel y Europa.
Según el auto judicial, el detenido formaba parte de un grupo de ciudadanos libaneses asentados en España y Alemania, con diversos vínculos con Hezbolá. A través de empresas españolas, habrían adquirido una gran cantidad de componentes y materiales cuyo destino final sería la organización en Líbano.