Lo que pudo haber terminado en tragedia tuvo un giro inesperado en la ciudad de Fengyang, al este de China. Durante una jornada turística activa, el techo de la emblemática Torre del Tambor, construida hace más de 650 años, colapsó parcialmente ante la mirada atónita de cientos de visitantes. A plena luz del día, el estruendo de las tejas cayendo y una nube de polvo gris alertaron a los presentes, quienes huyeron despavoridos de la zona.
Las redes sociales, especialmente X (antes Twitter), se llenaron de imágenes y videos capturados por los propios turistas. En cuestión de horas, el colapso de este monumento histórico se convirtió en tendencia. El hecho ocurrió el martes 19 de mayo en la provincia de Anhui, y las autoridades locales confirmaron que ya se ha iniciado una investigación para determinar las causas exactas del incidente, informa Clarín.
Al observar las imágenes, se puede apreciar cómo la estructura vibra justo antes de derrumbarse, en una escena que recuerda al retumbar de un tambor en plena ceremonia. Este paralelismo cobra aún más fuerza si se considera que la torre fue originalmente erigida en 1375 para marcar las horas del día y el inicio de rituales importantes.
Desde su construcción durante la dinastía Ming, la torre ha sido símbolo de identidad cultural para la región. Tras años de desgaste, había sido objeto de una importante reconstrucción en 1995, y desde finales de 2023 se encontraba en proceso de restauración, aunque continuaba abierta al público como una atracción destacada, a solo 320 kilómetros de Beijing.
Los testigos describieron con detalle lo ocurrido. “La caída de las tejas duró uno o dos minutos”, relató un vecino al medio local Yangcheng Evening News. Otro residente aseguró haber escuchado cómo una a una se precipitaban las tejas mientras estaba en una tienda cercana. Aunque el lugar suele llenarse de niños por la tarde, afortunadamente en ese momento no había nadie en la plaza, evitando así cualquier herido o víctima fatal.
Las autoridades culturales de Fengyang informaron que el daño afectó principalmente la cúpula superior de la torre, una sección que había sido reconstruida en los años 90. La base original, perteneciente a la dinastía Ming, permanece en pie. Aun así, el evento representa una pérdida significativa en términos patrimoniales y culturales.
Por ahora, la zona fue clausurada y se encuentra bajo evaluación estructural. Fengyang, ciudad natal del emperador Zhu Yuanzhang, fundador de la dinastía Ming, es considerada un enclave histórico fundamental. La caída del techo de su torre más icónica reabre el debate sobre la preservación del patrimonio en contextos de exposición turística y envejecimiento estructural.