Hoy: 22 de noviembre de 2024
Entre lágrimas, Sofía Cristo se ha sentado en el plató de Espejo Público tras la última exclusiva de Ángel Cristo en Lecturas. En esta exclusiva, Ángel Cristo no solo anuncia la fecha de su boda con Ana Herminia, sino que también arremete como nunca contra Bárbara Rey. La acusa de racismo y, además, la señala por fingir varios intentos de suicidio para manipularlo.
Destrozada, la hija de la vedette ha asegurado que su madre “sufre un maltrato psicológico continuado desde hace meses” y se ha lamentado de que los medios de comunicación estén siendo “cómplices” del maltrato “dándole voz” a su hermano.
“Estoy agotada. Nunca he hablado de él. He hablado de mis adicciones, de mis problemas y he defendido a mi madre de un maltratador”, ha afirmado, reconociendo que no sabe si en estos momentos le compensa trabajar en televisión. “No me gusta comentar corazón, no me gusta comentar esta mierda. Estoy cansada. No voy a hablar de esta mierda nunca en mi vida. He llegado a mi límite”, ha estallado.
Sin nombrar a su hermano y a su cuñada, Sofía les ha pedido que les dejen en paz de una vez por todas y les ha aconsejado que hablen todo lo que quieran de su boda, pero que tanto ella como su madre queden al margen.
“Que vendan todo, la luna de miel, lo que quieran, pero que nos dejen tranquilas porque esto es un puto machaque psicológico y mi madre en algún momento se morirá porque tiene 74 años. A nadie le importa una mierda la vida de ellos y si no hablan de Bárbara Rey, no hay una portada como esta. Son tan culpables unos como otros”, ha añadido abatida, reconociendo que los continuos ataques de su hermano no le dejan continuar con su vida y la tienen “irritada irascible y tensa”.
Sobre cómo se encuentra su madre, Sofía confiesa que ella intenta estar bien y está en tratamiento. “Va a la psicóloga, está con sus amigas e intenta estar bien, pero lo único que pedimos es que nos dejen tranquilas”, ha pedido.
“Perdonaré a mi hermano cuando esté muerto como mi padre. No quiero saber nada de él, absolutamente nada de él. No quiero verlo, no quiero saber nada de ellos, los quiero muy lejos. No quiero saber nada de él ni hablar de él, pero podría hacerlo”, ha sentenciado, dejando entrever que ella también podría hacer mucho daño a Ángel si contase ciertas cosas. Algo que no va a hacer porque lo único que quiere es seguir con su vida lejos de su hermano.
“Me podía esperar muchas cosas de él, pero es que no quiero hablar de él. Con decir que lo perdonaré cuando esté muerto, ya es un titular y un titular sensacionalista que utilizarán. No pienso leer la entrevista, pero que no nombre a mi madre que es muy mayor y solo pido que nos deje tranquilas, que ya hemos sufrido mucho durante muchos años”, ha concluido completamente hundida y dejando claro que no hay ninguna posibilidad de reconciliación con su hermano.