Hoy: 23 de noviembre de 2024
El Ministerio de Sanidad ha presentado la campaña Yo soy del sexo seguro, cuyo objetivo es visibilizar las infecciones de transmisión sexual (ITS) entre la población joven, fomentar la prevención, el autocuidado y la responsabilidad individual en su propia salud sexual y la de las personas con las que se relacionan, en un marco de auge de ITS en España y en Europa.
Tal y como recuerdan desde Sanidad, muchas ITS no presentan signos ni síntomas tras haberlas contraído, lo cual facilita su transmisión. El preservativo se ha demostrado como la medida más eficaz de prevención de las ITS durante las relaciones sexuales.
La iniciativa se ha presentado más de 30 años después del famoso Póntelo, pónselo, que se popularizó a principios de los 90 para prevenir el VIH. En el spot que se ha dado a conocer, se visualiza a diferentes jóvenes que pronuncian las siguientes frases: “Yo soy del sexo que habla. Yo soy del sexo sin culpa. Yo soy del sexo que respeta. Yo soy del sexo sin infecciones”, para acabar diciendo “Yo soy del sexo seguro”.
Según ha explicado Inmaculada Puig, subdirectora general de Atención a los Ciudadanos, la primera parte “apela a los valores, como la comunicación, la libertad sexual, la empatía y el respeto”, y luego se alinea con “la prevención y el autocuidado”. En la segunda parte, se hace una “llamada a la acción” de los jóvenes contra las ITS.
El director general de Salud Pública, Pedro Gullón, que ha conducido la presentación de la campaña, ha alertado de que las ITS llevan en auge “más de 20 años”. “Tenemos que cambiar el foco, hablar de poblaciones especialmente vulnerables, más allá de la población general”, ha señalado. Si bien las estimaciones “no son nada halagüeñas”, ha recordado que la prioridad es evitar que en 2030 estas infecciones sean “un grave problema de salud pública”.
Por su parte, la directora de la división de Control de VIH, ITS, Hepatitis Virales y Tuberculosis, Julia del Amo, ha señalado que esta campaña está enmarcada en el Plan Estratégico de Prevención y Control del VIH, que tiene como objetivo poner un foco diferente en función de las poblaciones “clave”. Con respecto a la campaña, Del Amo ha asegurado que “hay mucha nostalgia” del ‘Póntelo, pónselo’, pero ha incidido en que en todas las campañas del Ministerio “está presente el preservativo”, aunque en este anuncio sea “más sutil”.
En este sentido, Del Amo ha resaltado que el preservativo es “clave”, ya que es un método de prevención-barrera “fundamental”, siendo “un objetivo claro” en el Plan Estratégico. “En el Ministerio, dentro del equipo actual, hay un interés marcado por facilitar el acceso del preservativo a los jóvenes, lo que implica la gratuidad del mismo para aquellos de entre 16 a 22 años, a través de un presupuesto de 10 millones de euros”, ha recordado.
Según el Informe Juventud en España 2020, aunque las personas jóvenes prefieren utilizar el preservativo en sus relaciones sexuales con penetración (80%), un 37% dice que no lo ha utilizado en alguna ocasión en el último año por diversas causas.
En torno a un 27 por ciento alegó haber usado otro método anticonceptivo; un 25 por ciento que conocía lo suficiente a la persona; y un 13 por ciento que no tenía preservativo en aquel momento. Por edades, un 77 por ciento de los jóvenes entre 15 y 24 años usan el preservativo, pero cae al 69 por ciento entre aquellos comprendidos entre los 25 y los 29 años.
Según los datos que ha aportado Victoria Hernando Sebastián, investigadora del Centro Nacional de Epidemiología, en 2022, el 10,6% de los nuevos diagnósticos de VIH correspondieron a jóvenes menores de 25 años, siendo los hombres y las personas nacidas en el extranjero los más afectados. La principal vía de transmisión fue a través de relaciones sexuales.
Por otro lado, el 37% de estos jóvenes presentaba un retraso en el diagnóstico. En cuanto a otras ITS, como la sífilis, gonorrea y clamidia, el porcentaje de jóvenes afectados también es significativo, especialmente en el grupo de 20 a 24 años.
Las mujeres presentan mayores tasas de incidencia en gonorrea y clamidia, mientras que los hombres son los más afectados por la sífilis.
En resumen, el 10,6% de los nuevos diagnósticos de VIH se dan en menores de 25 años. En la sífilis, el 10,2% de los casos se registran en este grupo de edad. Igualmente, el 23,8% de los casos de gonorrea se notifican en menores de 25 años, un porcentaje que sube al 37,6% en el caso de la clamidia.
Por su parte, Mar Vera, del grupo de estudio de ITS de la Sociedad Española de Enfermedades Infecciosas y Microbiología Clínica (SEIMC), ha señalado que “los adolescentes y los jóvenes presentan una vulnerabilidad que, unida a las barreras habituales para la utilización de las diferentes medidas preventivas, los convierte en uno de los colectivos de mayor riesgo para adquirir y transmitir las diferentes ITS”.
Tal y como ha recordado, la Organización Mundial de la Salud (OMS) considera a esta población como “específica” para adquirir y transmitir las infecciones de transmisión sexual, al igual que trabajadores del sexo y clientes, hombres que tienen sexo con otros hombres, personas transgénero, reclusos y consumidores de drogas.
De hecho, en Estados Unidos insisten que en el colectivo de adolescentes y jóvenes entre 15 y 24 años, aunque constituyen solo el 27% de la población general, conllevan la mitad de las 20 millones de nuevas infecciones que se diagnostican anualmente.
Así, el 70 por ciento de las gonorreas, el 63% de las clamidiasis; el 49% de la enfermedad relacionada con el virus del papiloma humano (VPH); el 45% de la infección por el virus herpes simple tipo 1, tipo 2 a nivel genital; el 26% de los nuevos diagnosticados de infección por el VIH y el 20% de la sífilis se dan en el colectivo de jóvenes de entre 15 y 24 años.
Asimismo, ha detallado que los jóvenes tienen una predisposición al contagio de las ITS “desde dos puntos de vista: el biológico y el comportamental”. Biológicamente, por la inmadurez del sistema inmunológico característico de esta edad. En lo que respecta al ámbito comportamental, porque cada vez se está viendo un inicio más precoz en las relaciones sexuales. En España, el comienzo se sitúa en los 16,2 años.
Para mejorar esta situación, Vera ha abogado por transmitir “mensajes en positivo”, y hablar más de “salud sexual”, en lugar de “infecciones de transmisión sexual”, y normalizar los cribados rutinarios en este sentido.
Para la presidenta del Consejo de la Juventud de España, Andrea González, una de las claves para atajar este problema reside en la educación sexual, en detrimento del consumo de pornografía. “La edad a la que se mantienen relaciones sexuales por primera vez entre los jóvenes está entre los 12 y los 14 años aproximadamente. Pero el consumo de pornografía por primera vez nos lo encontramos entre los 9 y los 11 en hombres, un poquito más tardío”, ha alertado, para añadir que “la primera charla sexual no llega hasta los 14-15 años”.
En este sentido, ha llamado a una comunicación “efectiva y no paternalista” hacia los jóvenes. “Tenemos que ser parte del proceso”, ha reclamado.