Un crimen estremeció Bilbao en las primeras horas del viernes. En un domicilio del barrio de Rekalde, la Ertzaintza halló los cuerpos sin vida de un hombre de 43 años y su hija de 13, ambos con signos evidentes de violencia, según una información publicada en Europa Press.
Las primeras hipótesis apuntan a un presunto caso de violencia vicaria. El padre habría matado a la menor antes de suicidarse, mientras que la madre logró escapar del ataque con heridas y fue trasladada al Hospital de Basurto.
La Ertzaintza, junto a la Policía Municipal, mantiene acordonada la zona y ha iniciado una inspección técnica para esclarecer los hechos. El domicilio en Rekalde será clave para reconstruir el crimen.
Este caso reabre el debate sobre la violencia vicaria, una de las formas más crueles de violencia de género, en la que los hijos son utilizados como instrumento de daño a la madre. Asociaciones y autoridades han mostrado su consternación y han convocado minutos de silencio en señal de repulsa por este crimen que vuelve a poner el foco en la necesidad de reforzar las medidas de protección a las víctimas.