El judoca Fran Garrigós se hacía el pasado sábado con la primera insignia al ganar el bronce en la categoría de -60 kilos contra el georgiano Giorgi Sardalashvili
"Los Juegos Olímpicos deberían celebrar la unidad y el respeto. Esto no es libertad de expresión. Es una imposición más de la ideología de género", aseguran fuentes eclesiásticas