Montero anuncia que el PSOE proseguirá con la tramitación de enmiendas a la Ley Trans porque “no quiere un acuerdo” y teme que sume sus votos al PP para “recortarla”
Podemos ha culpado al PSOE de no respetar el acuerdo de coalición por no querer un pacto en la tramitación en el Congreso de los Diputados a cuenta de la Ley Trans. Los morados le trasladaron hace tres semanas que fueran juntos a la ponencia de esta norma. Sin embargo, los socialistas lo han rechazado en la mañana de este lunes.
Conforme han explicado fuentes de Podemos a Europa Press, desde el partido tienen miedo de que la postura del PSOE les abra la puerta a apoyarse en los votos del Partido Popular para “recortar los derechos a las infancias trans“.
Así, el partido liderado por Ione Belarra informó al PSOE de que en materia de derechos de infancias trans, la doctrina del Tribunal Constitucional es clara y que varios menores han tenido la posibilidad de modificar su género en el DNI. Les trasladaron así a los socialistas de este modo que el tribunal de garantías ya consideró inconstitucional excluir a los menores del derecho a decidir su libre identidad de género.
Su estrategia era consensuar una propuesta para ir unidos a la ponencia, al igual que hicieron con la Ley de Memoria Democrática, con la intención de que no se postergase la recta final de la tramitación de la ley. Un asunto que ahora les genera preocupación a los morados.
Montero dice que la tramitación vive un “momento difícil”
Según ha anunciado la ministra de Igualdad también este lunes, Irene Montero, el grupo parlamentario socialista proseguirá con la tramitación de enmiendas a la Ley Trans. “Nos acaban de comunicar que el PSOE no quiere el acuerdo e irá con sus enmiendas a la ponencia”, ha asegurado.
Montero ha explicado, en una entrevista en TVE, que “la propuesta del Gobierno es la ley que está en tramitación”, pero ha incidido en que la decisión del PSOE es “no buscar un acuerdo”. Debido a ese movimiento del socio mayoritario de la coalición ha mostrado su preocupación por el “momento difícil” que vive “la tramitación de la ley”. Su miedo es que posibilidad de que “PSOE y PP puedan sumar (votos) para que se produzcan recortes de derechos en la infancia trans”.
Sin embargo, “todavía quedan horas” para tratar de dar la vuelta a la situación. “El PSOE me ha trasmitido que no quiere ese acuerdo, pero estamos a tiempo de tratar de que eso no ocurra”, ha recalcado Montero.
La autodeterminación de género en los menores, un tema sensible, ha sido el principal motivo de discusión entre el Partido Socialista e Igualdad. El grupo parlamentario socialista presentó el pasado 31 de octubre unas enmiendas parciales al texto legal con las que tratará de imponer que los menores de 12 a 16 años necesiten autorización judicial para poder cambiar el nombre y el sexo en el Registro Civil. Dicho aspecto únicamente figura actualmente en el texto para los menores de 12 a 14 años.
Otra de las enmiendas dispone que, en caso de que se quiera revertir el cambio de sexo en el registro, se tendrá que obtener aprobación judicial a través de un expediente de jurisdicción voluntaria. Actualmente, el proyecto de ley contempla que esta reversibilidad se pueda solicitar a partir de los seis meses a través del mismo procedimiento regulado para el cambio registral, que no requiere aval judicial en mayores de 14 años.
No dimite por los efectos de la ley del ‘sí es sí’
En otro orden de asuntos, ha reconocido que no ha pensado en irse y ha añadido que, al margen de los ataques personales -en alusión a Vox- el movimiento feminista tiene “la responsabilidad colectiva de demostrar que no hay violencia política capaz de frenar la fuerza del feminismo”. Recientemente, una grieta en la ley ha generado un goteo de rebajas de condenas y excarcelaciones dado que “los responsables políticos” tienen “la obligación de dar la cara”
La titular de Igualdad ha admitido que vive “con mucha preocupación la violencia política como estrategia desplegada por la derecha y la extrema derecha”. Según ha trasladado, “no va a parar” y ha manifestado que el ataque de Vox, supuso que “el vaso rebosara”, en referencia a las palabras de la diputada Carla Toscano. La parlamentaria del partido liderado por Santiago Abascal le dijo que su único “mérito” había sido “estudiar en profundidad” a Pablo Iglesias, exvicepresidente del Gobierno y pareja de Montero.
“Antes se habían echado en el vaso muchas gotas, no es un insulto puntual, sino una estrategia continuada y no van a parar porque lo que quieren es frenar los avances feministas”, ha agregado.
Asimismo, ha advertido que “la violencia política es una estrategia continuada por la cual, durante muchos días seguidos, meses, años, se lleva acabo una estrategia de destrucción personal de la persona y cuando esa estrategia se sostiene desde muchos altavoces y durante mucho tiempo se consigue el objetivo”. Ha lamentado en ese sentido la respuesta la PP a los insultos de Vox: “Quien siembra vientos recoge tempestades”.
Respecto a si se sintió respaldada por el Gobierno ante la bronca política generada por la entrada en vigor de la ley del ‘solo sí es sí’ y la disminución de penas a delincuentes sexuales, ha apuntado que ese apoyo “ha sido público y notorio”. Sin embargo, ha precisado que “lo más importante cuando se habla de violencia política es que se pueda traducir en una confianza y determinación política fuerte”.