La opositora hizo especial hincapié en la importancia del momento histórico para “liberar” al país del régimen de Maduro
La líder de la oposición venezolana, María Corina Machado, ha lanzado una convocatoria para una protesta masiva tanto en Venezuela como en diversas ciudades del extranjero el próximo 1 de diciembre. Con este llamado, Machado busca movilizar a los ciudadanos para exigir “la liberación de Venezuela” en el contexto de las próximas fechas clave para el país, especialmente de cara al 10 de enero, fecha en la que, según la Constitución, debería asumir el nuevo gobierno.
Durante un encuentro digital, Machado enfatizó la urgencia del momento y el compromiso de la oposición. “Nos toca a nosotros liderar este proceso y lograr que todos los actores hagan lo que les corresponde. Estamos planificando este 1 de diciembre una enorme protesta”, afirmó. Ante las preguntas sobre el 10 de enero, reiteró que el cambio debe empezar “hoy mismo”. Para Machado, la fecha de toma de posesión es más un símbolo de movilización: “El 10 de enero es un movimiento de redención para la liberación de Venezuela”, aseguró.
Aglutinando la oposición
Machado instó a todos los sectores, tanto dentro como fuera del país, a desempeñar su papel con “claridad y determinación”, siguiendo el “plan justo” que la oposición ha definido “con disciplina” para enfrentar al régimen de Nicolás Maduro. “Por eso estamos donde estamos”, añadió, sugiriendo que el trabajo organizado y el esfuerzo conjunto han fortalecido su movimiento.
La excandidata presidencial subrayó que “el momento es ahora”, argumentando que el régimen de Maduro se enfrenta a profundas fracturas y divisiones internas debido a su “crueldad, corrupción y dureza”. Aunque no todas las tensiones dentro del gobierno son visibles para el público, Machado aseguró que estas debilidades se están incrementando, provocando un proceso de “descomposición”.
Presentándose como la figura de referencia para la resistencia y el cambio, Machado se comprometió a construir un movimiento basado en “dignidad, solidaridad y justicia”. Su visión apunta a un futuro en el que los venezolanos puedan reencontrarse con sus familias y reconstruir una nación de la cual puedan estar “profundamente orgullosos”. Según sus palabras, el próximo 10 de enero simboliza todo lo que su movimiento ha trabajado para lograr: la redención y la “liberación de Venezuela”.