Un informe de los servicios jurídicos del Senado ha calificado de inconstitucional la reforma de la Ley de Asociación promovida por el PSOE, cuyo objetivo es permitir la disolución de entidades que defiendan el franquismo. Sin embargo, la mayoría del PP en la Mesa del Senado ha decidido proceder con su tramitación para evitar posibles acusaciones de prevaricación.
Según informan fuentes parlamentarias a Europa Press, los letrados del Senado han identificado varios aspectos de la reforma que contravienen la Constitución. A pesar de ello, la Mesa del Senado ha optado por admitirla a trámite, citando un precedente similar con la Ley de Amnistía, cuya inconstitucionalidad fue también señalada por los letrados, pero que igualmente fue tramitada en la Cámara Alta.
La reforma fue aprobada recientemente en el Congreso con el apoyo del PSOE, Sumar, ERC, Junts, Bildu, PNV, Podemos, el Bloque Nacionalista Galego, Coalición Canaria y Unión del Pueblo Navarro, mientras que el PP se abstuvo y Vox votó en contra.
Este cambio legislativo tiene como objetivo cumplir con la disposición adicional séptima de la Ley de Memoria Democrática de 2022, que ya preveía la modificación de la Ley de Asociación en este sentido. La nueva norma afecta únicamente a asociaciones, ya que las fundaciones, como la Fundación Franco, siguen un procedimiento distinto para su disolución, dependiendo del Ministerio de Cultura, liderado por Ernest Urtasun, de Sumar, quien ya inició los trámites en junio.
Para evitar que la Fundación Franco pueda transformarse en una asociación y eludir su disolución, el PSOE ha impulsado esta reforma paralelamente.