Lalachus, si pides respeto para ti tienes que dárselo a los demás

A ver querida Lalachus, ¿qué necesidad tenías de estropearlo todo mostrado durante las campanadas una estampita del Corazón de Jesús con la cabeza de una vaquilla, creo que la del concurso ‘El Gran Prix’?

No sé qué razones tenías, ni qué intención te llevó a eso. ¿No sé si era un homenaje a Ramón García, habitual presentador del acto, o si era una queja irreverente a las religiones del mundo o de la católica en particular? Lo que sí sé es que has metido la pata y que todo lo que habías conseguido, que es mucho, en la condena de la falta de respeto en las redes por ser gorda lo has dinamitado, al menos para una parte de la población que se ha visto ofendida por ese detalle.

Fueron unos segundos pero no pasaron inadvertidos. La presentadora de las campanadas junto a Broncano en TVE, es decir la televisión que se sostiene con fondos públicos, mostró a cámara una estampa de la vaca con el Corazón de Jesús, de enorme simbología para los católicos, y eso ha desatado una polémica considerable en la que se ha pronunciado hasta la Conferencia Episcopal y algunos partidos han llamado al Gobierno y al responsable de RTVE a dar explicaciones. Y eso cuando Lalachus y Broncano habíaN conseguido ser líderes la ‘noche de las uvas’ y destronar después de muchos años a los sugerentes vestidos de la Pedroche en Antena 3.

Para el presidente de los obispos, mostrar esa imagen y más en un programa de máxima audiencia, es una “burla”, al mofarse de un símbolo muy querido por los católicos. Cree Luis Arguello que lo hace amparándose en la “coartada” de la libertad de expresión y los excesos festivos, y lamenta que se hagan estas cosas banalizándolo todo. Muchos obispos y religiosos también han mostrado su rechazo de forma individual en lo que consideran “ataques deliberados a la fe”.

Cuando algunas organizaciones religiosas han anunciado medidas legales, el ministro, y nada más y nada menos que de Justicia, Félix Bolaños, ha salido en defensa de la presentadora y anuncia que el Gobierno reformará el delito de ofensas religiosas para garantizar la libertad de expresión, una medida más del famoso Plan de Acción por la Democracia.

Olvida Bolaños dos cosas. Una es que, sea legal o no, no dejará de ser una ofensa a una parte de la sociedad que se sienta atacada en sus creencias. Otra es que mi libertad acaba donde empieza la de los demás. Para ser ministro de Justicia debería tenerlo en cuenta y saber estas cosas ‘de oficio’. Todo no vale, señor ministro, todo no vale ni todo se arregla a base de decretazos o leyes que minen derechos de unos a costa de los de otros.

Cuando se montó la campaña en redes sociales contra Lalachus en contra de que presentase las campanadas por ser gorda, con todo tipo de mofas y burlas crueles, yo mismo lo denuncié en esta sección porque jamás se debe menospreciar a nadie por sus problemas físicos o mentales, y me alegré mucho de que presentase un programa tan relevante alguien lejos de los estereotipos de la belleza. Pero de la misma manera te digo ahora querida Lalachus que quien pide respeto debe darlo y con ese gesto inapropiado e inoportuno has insultado a miles de personas, queriéndolo o no, y te honraría pedir disculpas y explicarte.

Y al ministro ese que se vaya a coger setas ya de una vez por todas. O directamente al carajo