Regiones como Europa Central, Gran Bretaña y el sur de Fenoscandia han experimentado menos precipitaciones de lo normal
La primavera meteorológica —que comenzó el 1 de marzo y finalizará el 1 de junio— ha estado marcada en España por la llegada de seis borrascas de gran impacto, cuatro de ellas concentradas en apenas 15 días de marzo. A diferencia de esto, el norte de Europa ha vivido una estación inusualmente seca.
En Reino Unido, por ejemplo, la primavera ya es la más seca desde 1852, según su servicio meteorológico, que atribuye esta anomalía a un anticiclón situado sobre el norte europeo que ha desviado las borrascas hacia el sur del continente.
Según el boletín de abril del Servicio de Cambio Climático Copernicus (C3S), regiones como Europa Central, Gran Bretaña, el sur de Fenoscandia y partes de Europa Oriental han experimentado menos precipitaciones de lo normal. En contraste, en el sur de Europa —incluida España—, el norte de Noruega, el sur de Finlandia y algunas zonas del oeste de Rusia, las lluvias han sido superiores a lo habitual.
Preocupación en el norte de Europa
Rubén del Campo, portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología, ha explicado que ese anticiclón persistente en el norte ha empujado las borrascas hacia el sur, provocando una primavera muy lluviosa en España mientras en el norte del continente la sequía empieza a preocupar. “Mientras nosotros estamos casi dando por finalizada la sequía de larga duración, en esos países del norte de Europa se están empezando a preocupar porque es un problema que durante tres meses llueva muy poco cuando suele hacerlo”, explicó Del Campo durante la presentación del Informe sobre el Estado del Clima en España 2024.
La doctora en Física y meteoróloga de Eltiempo.es, Mar Gómez, ha señalado que el anticiclón de las Azores —habitualmente responsable de frenar las lluvias atlánticas en la península ibérica— se ha desplazado hacia el norte y ha perdido fuerza, lo que ha permitido la entrada de más temporales desde el Atlántico. “Mientras tanto, en el norte de Europa han dominado las altas presiones, bloqueando allí la llegada de borrascas”, ha apuntado.
Una consecuencia llamativa de esta situación es que, esta primavera, en Madrid ha llovido más que en Londres, como ha destacado el meteorólogo de Meteored, Francisco Martín. Según los datos de Aemet, entre el 1 de marzo y el 15 de mayo, en España han caído 257 litros por metro cuadrado, mientras que en Reino Unido apenas se han registrado 80,6 litros por metro cuadrado. Así, España vive una de sus primaveras más lluviosas desde 1961, mientras que el Reino Unido experimenta la más seca en más de 170 años.