Piden doce años de prisión para el acusado de violar a una mujer que conoció en una aplicación de citas

La Fiscalía sostiene que estos actos constituyen un delito de agresión sexual

La Fiscalía de Cantabria ha presentado una solicitud de doce años de prisión para un hombre acusado de cometer un delito de agresión sexual. La acusación se basa en la presunta agresión a una mujer que había conocido a través de una red social de citas.

El juicio está programado para el martes 20 de febrero a las 10.30 horas en la Sección Tercera de la Audiencia Provincial, según informó el Tribunal Superior de Justicia de la comunidad.

De acuerdo con la Fiscalía, el acusado y la víctima intercambiaron mensajes y números de teléfono a través de la red social de citas. Las conversaciones entre ambos fueron descritas como “continuas”. Posteriormente, el acusado mostró un gran interés en visitar a la mujer, y acordaron una cita.

Durante el encuentro, después de comer, se dirigieron a la casa de ella, donde el hombre, según la acusación, procedió a agredirla sexualmente, inmovilizándola, golpeándola y forzándola a realizar actos sexuales.

Relaciones consentidas que derivan en abuso

La Fiscalía sostiene que estos actos constituyen un delito de agresión sexual y busca una pena de doce años de prisión, quince años de prohibición de comunicarse o acercarse a la víctima y diez años de libertad vigilada, además de una indemnización de 6.000 euros por daños morales.

Por otro lado, la Fiscalía también ha pedido una pena de seis años de prisión para un hombre acusado de abuso sexual con penetración a una mujer a la que conoció de madrugada en una discoteca de Santander. El juicio está programado para el mismo día a las 9:30 horas en la Sección Primera de la Audiencia.

Según el escrito de calificación provisional del ministerio público, ambos mantuvieron relaciones sexuales consentidas en un principio, pero en un momento dado, el acusado retiró el preservativo sin avisar a la víctima y la penetró analmente de manera repetida.

La Fiscalía sostiene que estos hechos constituyen un delito de abuso sexual con penetración y busca una pena de seis años de prisión, siete años de prohibición de acercarse o comunicarse con la mujer, seis años de libertad vigilada, y cinco años de inhabilitación para desempeñar cualquier actividad que implique contacto con menores, además de una indemnización de 5.000 euros por perjuicios morales.