Hoy: 25 de noviembre de 2024
Que gran diferencia existe en la mayoría de los países, donde la libertad está implantada como un mantra constante en los discursos partidistas y no, como un sistema necesario de convivencia para todos sus habitantes.
Crecer en libertad, es un canto a la vida, es respirar sin que te amordacen las palabras, es sentir que mandas en tu vida y no los otros, es tener en tus manos tu futuro, sin cortapisas.
Cuando has vivido en sistemas opresores, llegas a la convicción que es así como debe ser, siempre que no te impliquen esas prohibiciones. Así lo viven quienes al ser cabezas de familia se someten a la postura impuesta, por ser la más adecuada para la seguridad de sus hijos.
Cuando los tiempos cambian y llegan nuevos gobiernos que te venden una maravillosa libertad, quieres creerla y respiras feliz, tomando aire hasta casi la extenuación, con una esperanza de poder exponer tus ideas y proyectos.
Lo trágico es, cuando pasado un tiempo y esos gobiernos se asientan, comienza la gran carrera de lograr el mayor poder posible, pisando a quien convenga y tumbando todas las leyes establecidas décadas atrás, que estaban creadas para la grandeza de la Nación y el bienestar de los ciudadanos.
Es el tiempo adecuado para levantar muros impenetrables que impidan acceder a lo anteriormente creado y donde expresarse libremente se convierta en sanciones, prohibiciones y críticas.
Es el tiempo de deshacer lo establecido y dejar que fluyan las ideas de quienes desean la destrucción de un sistema que funcionaba, solo por demostrar su poder ante sus seguidores sectarios, sometiéndose a chantajes descarados, solo por querer ser lo que jamás creyeron que podría llegar a ser, y todo a costa de arrastrar una mala fama por dejarse chantajear vendiendo su propia alma, por su inmenso ego.
A algunos, les cuesta mucho enterarse, para otros estar informados les aburre, les cansa… se conforman con cobrar sus pensiones o subvenciones y las cervezas de los fines de semana.
Otros, los que levantan el país exponiendo sus capitales para crear trabajo y vivir ellos, con sus pequeños negocios y con su sinvivir, por miedo a no poder pagar esas nóminas que son sagradas, se ven ante la necesidad de cerrar y pagar todas esas deudas como buenamente puedan y que se han creado por esa falta de trabajo que ha terminado mermado sus ahorros hasta el punto de no existir entradas, en esa caja que permanece vacía.
Esas son las autenticas mazmorras tenebrosas que crean esos gobiernos, donde pululan muchos de sus dirigentes que no han dado un palo al agua en su vida, que jamás han sido autónomos ni han tenido que pagar nóminas, que carecen de empatía y que los ciudadanos solo les sirven para llenar sus egos y sus cuentas, por eso se venden tan fácilmente, igual que esa dignidad que dejaron en barbecho, tiempo atrás.
Robar de las arcas de tu país, es la manera mas repugnante vil y miserable que solo puede llevarla a cabo alguien que cree, que la justicia le perdonará.
Luego se venderá como liberador de la democracia la moral y la decencia, por suerte el tiempo pone a todos en su sitio y solo podrá venderla a sus palmeros, los otros, no le creerán jamás. El vaso de las mentiras se convirtió en cántaro y rebosa su repugnante agua.
Pero por hartazgo, la población puede llegar a sublevarse, primero por esas ideologías destructivas metidas en las cabezas de muchos, por una “inteligencia macabra” que del fraude hace ley para su beneficio y todo nos lo venden envuelto en un buenismo carente de verdad y decencia moral.
¿De que sirven las Autonomías cuando no son iguales para todos?
Es más, si lo hacen con chantajes descarados y quienes se lo tienen que facilitar, lo consienten por ¡¡PODER!!
¿Qué harán los perjudicados? ¿Se lo han preguntado?
Mucha gente que está en las cárceles españolas, tienen más decencia y moral que muchos de los que están en las calles de los pueblos y ciudades mientras otros que fueron condenados pisan no solo el nombre de su país sino las alfombras de lugares venerables hasta la entronización de algunos indeseables.
Muchos desean ver sus fotografías como en otros tiempos aparecían en aquellas tabernas de una tierra querida y maravillosa, que cuando entrabas para tomarte un chikito en una taberna y te veías obligado a brindar por aquellos que aparecían en aquellos carteles, unos en las cárceles, otros en paradero desconocido y otros finiquitados, y lo hacías por miedo a que te increparan, o algo peor.
Tenemos que recordar y no con esa memoria selectiva para beneficio propio, recordamos por edad por haberla vivido, por haberla gozado o por haberla sufrido, entonces y ahora.
¡LA MEMORIA, ES PERSONAL, NO ES, COLECTIVA Y NUNCA DEBE SER IMPUESTA! Es un error intentarlo, puede volverse contra quien lo intente.
El pensamiento es el don más preciado que poseemos los seres humanos por ser.
¡Auténticamente LIBRE!
No solo el tiempo los pondrá en su sitio sus acciones ya lo están haciendo pues empiezo a ver a un pueblo despertar no aquel que recibe dádivas del estado o el que vive anclado en el pasado o el que no ve más allá de sus narices si no el que todavía le queda alguna neurona para darse cuenta de que estaba equivocado que así no vamos más que a la deriva Estos son los que se saldrán del cesto y darán la vuelta a la tortilla
La gran pena de esta situación es que mendigamos la libertad vendiendo nuestra vida a gente despiadada, no somos capaces de darnos cuenta de que la libertad es nuestra y son ellos quien tienen que ganar nuestra confianza para que la depositemos en ellos.
Juegan y hacen con nosotros lo que les apetece y aún así nos vemos con la obligación de soportarlo, tanta importancia y tiempo invierten en nuevas leyes cuando lo único en lo que deberían centrarse es en los derechos de sus ciudadanos para poder mínimamente garantizar el respeto a estos.