La tomosíntesis tuvo un impacto aún mayor en mujeres con pechos densos
Un reciente estudio clínico, liderado por la Universidad de Córdoba (UCO), el Instituto Maimónides de Investigación Biomédica (Imibic) y el Hospital Reina Sofía de Córdoba, revela un significativo avance en la lucha contra el cáncer de mama.
La investigación, centrada en la eficacia de la tomosíntesis mamaria, más conocida como mamografía 3D, ha arrojado resultados prometedores al demostrar su capacidad para reducir casi a la mitad la incidencia de este tipo de cáncer entre dos rondas de cribado.
Este método de detección, complementario a la mamografía tradicional o mamografía 2D, ha mostrado su potencial al evitar la superposición de estructuras y proporcionar una imagen volumétrica más precisa de posibles lesiones. La Dra. Marina Álvarez, responsable de la Unidad de Radiodiagnóstico del Hospital Reina Sofía y una de las autoras de la investigación, destaca la importancia de estandarizar esta técnica en programas de cribado para mejorar la detección temprana del cáncer de mama.
Durante dos años, el estudio evaluó a cerca de 24.000 mujeres mediante mamografías 2D, mientras que otro grupo de 16.000 fue sometido también a tomosíntesis mamaria. Los resultados revelaron que la tasa de cáncer de intervalo fue significativamente menor en el segundo grupo, con una disminución del 49 por ciento en comparación con el primero.
Además, se observó que la tomosíntesis tuvo un impacto aún mayor en mujeres con mamas densas, donde la detección de lesiones es más desafiante. Los tumores detectados en mujeres sometidas a tomosíntesis fueron de menor tamaño, lo cual sugiere una mejora en el pronóstico de la enfermedad.
Estos hallazgos respaldan la necesidad de integrar la tomosíntesis mamaria de manera sistemática en los programas de detección precoz del cáncer de mama. La Dra. Cristina Pulido, autora principal del estudio, enfatiza la importancia de este avance, especialmente en una enfermedad que representa casi un tercio de todos los cánceres en mujeres y es la principal causa de muerte por cáncer en este grupo demográfico.
El compromiso con esta innovadora técnica ya está en marcha, con un creciente número de radiólogos capacitándose en su uso y la actualización de equipos en la Comunidad Autónoma andaluza. Este progreso promete mejorar aún más el diagnóstico y tratamiento de una enfermedad cuya supervivencia ha mejorado notablemente gracias a los avances médicos.